Un proyecto fomenta la donación de tejidos en pacientes seropositivos para avanzar la investigación frente al VIH
En este artículo publidado en la revista Science, el periodista Jon Cohen nos habla del proyecto Last Gift, una iniciativa que invita a personas con VIH en fase terminal a donar sus tejidos tras su muerte, con el objetivo de investigar dónde y cómo se oculta el virus en distintos órganos del cuerpo.
El proyecto ha ayudado a producir una decena de artículos científicos que confirman cosas como que el virus es capaz de esconderse en el cerebro, algo difícil de estudiar en vida, aunque también plantea problemas éticos, como el consentimiento claro y el respeto por los donantes y sus familiares.
El proyecto también pone en valor el papel de los donantes, que ven en su participación una manera de dejar un legado. Muchos expresan que, aunque no llegarán a beneficiarse personalmente de una cura, contribuirán a que futuras generaciones vivan sin la amenaza del VIH. Este aspecto humano es tan central como el científico: convierte la investigación en un acto de solidaridad que trasciende la propia vida.
