El ingeniero y profesor de la UC3M Ángel Crespo acaba de publicar ‘Falta una palabra’, una historia de amor escrita mano a mano con una inteligencia artificial
La inteligencia artificial se caracteriza por su capacidad de analizar grandes cantidades de datos y de aprender de ellos. Sin darnos cuenta está cada vez más presente en nuestras vidas y está demostrando un gran potencial en muchas áreas. Dado su crecimiento exponencial, su complejidad, su capacidad de mimetizarse detrás de toda la tecnología y nuestra mayor dependencia, cabe preguntarse muchas cosas que serán claves para un futuro que ya está aquí. Desde cuestiones éticas a otras no menos importantes como es nuestra capacidad para predecir su evolución. Una que ahora se plantea es si la inteligencia artificial es capaz de ser creativa. Está claro que la inteligencia artificial es capaz de desarrollar nuevas soluciones a problemas y, en algunos casos, incluso llegar a soluciones que los seres humanos no habrían podido alcanzar. Sin que los sepamos está presente en la medicina, en las finanzas, el derecho, la seguridad,… Si todo esto es ya relevante y apenas está comenzando, parece importante abrir debates sobre la IA.
El profesor García Crespo de la Universidad Carlos III de Madrid lleva más de treinta años trabajando en Inteligencia Artificial, y se ha planteado experimentar en el ámbito de la creación literaria, proponiendo escribir con una plataforma específica de IA una “historia de amor”, dado que es algo de lo más alejado que puede pensarse de las capacidades de un software, y plantear al lector, si es capaz de distinguir entre lo que ha escrito él y lo que ha escrito la IA.
¿Qué te impulsó a tomar la decisión de usar una IA para escribir una novela?
Desde antes de terminar la carrera empecé a trabajar en IA y no la he abandonado desde entonces. Las discusiones acerca de si la IA puede tener en algún momento conciencia o si es capaz de crear siempre me parecieron interesantes, aunque nos pueda parecer distante, quizás esté más cerca de lo que podamos imaginar. Como además llevo más de quince años escribiendo ficción, obteniendo diversos premios, y los nuevos modelos de generación de lenguaje a gran escala por fin dan resultados suficientemente aceptables para ser tenidos en cuenta (los estaba usando para generar código) pensé ¿qué pasaría si los usara para escribir una novela?, así que me decidí: metí un párrafo de una novela que tenía escrita y le dije que continuara, el resultado me dejó en shock.
¿Cuáles eran tus expectativas al inicio del proyecto?
La verdad es que era muy escéptico, no pensaba que fuera a poder continuar con la historia, pero según iba avanzando el resultado me parecía más que satisfactorio, era capaz de entender los personajes, desarrollar sus distintos caracteres y continuar la trama.
¿Cómo describirías la experiencia de trabajar con una IA durante el proceso de escritura?
“Metí un párrafo de una novela que tenía escrita
y le dije que continuara, el resultado me dejó en shock”
Fue como escribir con otra persona, pero a la velocidad del rayo. Metía un párrafo y con un sistema que hemos desarrollado me devolvía tres opciones en pocos segundos, de esas tres opciones elegía la parte que más me gustaba, como podía haberlo hecho si hubiera escrito a cuatro manos con otra persona. Lo que eché en falta fue poder tener una conversación sobre el por qué había puesto determinadas cosas y en algunos casos felicitarle por alguna frase. Lo más sorprendente no fue su capacidad de escritura formal, sino que, en el experimento, la plataforma propuso nuevos personajes y cambios relativamente complejos en las líneas argumentales.
¿El resultado final fue lo que esperabas? Si no, ¿por qué?
La verdad es que no esperaba mucho, fue simplemente un experimento, que, como he dicho antes superó todas mis expectativas.
¿Qué opinas sobre el argumento de que la literatura está en peligro de ser usurpada por la tecnología?
Peligro es una palabra demasiado concreta en este contexto. La cuestión no es esa porque más peligro sin duda es que el sistema financiero pueda colapsar por decisiones que tomen las diferentes herramientas de IA que hay actualmente interaccionando entre ellas. El peligro de la inteligencia artificial es que pueda ser utilizada para manipular a la gente de forma muy sutil, y conduzca a las personas a tomar decisiones en contra de sus deseos e intereses. Dentro de poco será capaz de crearnos un relato de cualquier tipo, específico para cada uno de nosotros, con determinados mensajes diseñados para para una sola persona teniendo en cuenta todo lo que el Big Data sabe de cada uno de nosotros. Por eso creo que se debe reflexionar sobre estos aspectos, y creo que es muy importante llegar a consensos para que, por ejemplo, se avise al ciudadano que el texto se ha generado por una IA y las instrucciones que se le han dado para construir el texto.
Hablemos ahora del proyecto de investigación ¿Cuál es la meta del proyecto de investigación?
El objetivo es doble: Por una parte, dar a conocer al público en general las capacidades que tiene hoy en día la IA para generar texto, y por otra analizar si un lector humano puede identificar que partes están escritas por la IA y que partes por mí.
¿Cómo se implicarán los lectores en el proyecto de investigación?
Estamos intentando atraer al mayor número de lectores posibles. En el texto de la novela cada párrafo está numerado, de tal forma que si el lector cree que un párrafo está escrito por la IA puede ir a una página web e indicarlo junto con el motivo con por el que cree que esos párrafos los ha escrito la IA.
¿Qué papel juega la subjetividad en el proyecto de investigación?
Lo importante para nosotros es averiguar si, a día de hoy, una máquina puede hacer algo que hasta ahora le estaba vedado, como era una acción creativa. Por supuesto que se puede pensar que no tiene mucha validez el estudio, que estoy haciendo seleccionando y modificando lo que ha escrito la máquina, pero viendo los resultados que se obtienen eso no me parece excesivamente relevante, en el fondo lo que estoy haciendo es lo mismo que haría si en vez de con una IA la hubiera escrito a cuatro manos con otra persona.
NOTA
GPT-3 (Generative Pre-trained Transformer 3) de OpenAI es un modelo de lenguaje autorregresivo que emplea aprendizaje profundo con 96 capas 175.000 millones de parámetros siendo capaz de producir textos de alta calidad, GPT-3 tuvo un coste de entrenamiento de más de 10 millones de dólares.
Todas las preguntas de esta entrevista han sido generadas con una inteligencia artificial mediante el modelo de generación de lenguaje a gran escala GPT3 partir de los siguientes textos:
Hazme una lista de preguntas a hacerle a un escritor que haya utilizado una IA para escribir conjuntamente una novela.
Dame preguntas acerca de un proyecto de investigación que consiste en que sobre una novela escrita en parte con una IA los lectores averigüen qué parte ha escrito un humano y que parte la IA.
El título de la entrevista lo generó GPT3 respondiendo a “búscame un titular para una investigación sobre la creatividad de una IA en la escritura de una novela”