Un equipo de investigadores del Laboratorio de Modelización Ambiental de la ETSI Industriales de la UPM ha revisado la zonificación actual de la Comunidad de Madrid gracias a una metodología novedosa
Existe una Directiva Europea sobre Calidad del Aire que indica que cada Estado miembro debe clasificar el territorio en zonas para la gestión de la calidad del aire. Dado que algunos de los factores clave pueden cambiar con el tiempo (como población o patrones de emisión), la zonificación se debe revisar cada cinco años. Y le ha llegado el turno a la Comunidad de Madrid. En un estudio realizado por investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) se ha desarrollado y aplicado una metodología novedosa, basada en los resultados de un sistema de modelización de la calidad del aire, para revisar la zonificación actual en la Comunidad de Madrid. Con base en análisis estadísticos de los indicadores legales pertinentes de los principales contaminantes (dióxido de nitrógeno, ozono y partículas), la metodología propuesta es capaz de definir áreas más homogéneas desde el punto de vista de la calidad del aire. Además, la nueva zonificación propuesta es compatible con la red actual de monitoreo de la calidad del aire en la región.
Con el objeto de evaluar la calidad del aire ambiente y facilitar su gestión, todas las comunidades autónomas tienen que establecer las zonas o aglomeraciones siguiendo las determinaciones de la Directiva 2008/50/EC (desarrollada por el Real Decreto 102/2011). Se busca que dentro de una zona determinada la calidad del aire y el nivel de exposición de la población a la contaminación atmosférica sean homogéneos, lo que facilite su adecuada monitorización y el desarrollo de planes y medidas de mejora. Una vez se establece la zonificación de una región, se requiere revisarla cada cinco años. Puesto que la zonificación actual de la Comunidad de Madrid (CM) data de 2014, es preciso proceder a su revisión y actualización. Actualmente, consta de siete zonas que consideran factores meteorológicos, fuentes de las emisiones, geografía, población, etc. Sin embargo, no hay una metodología estandarizada que permita definir zonas homogéneas desde el punto de vista de la calidad del aire de forma más objetiva y cuantitativa.
Un equipo de investigadores del Laboratorio de Modelización Ambiental de la ETSI Industriales (ETSII) de la UPM ha revisado la zonificación actual de la Comunidad de Madrid gracias a una metodología novedosa. Primero, el modelo calcula las concentraciones en el aire ambiente de los contaminantes atmosféricos más relevantes, sobre todo desde el punto de vista de su repercusión a la salud humana: dióxido de nitrógeno, partículas y ozono. En la simulación se calculan las concentraciones horarias para todo el año y luego, para cada municipio de la comunidad, se calculan valores representativos. Posteriormente, se realiza un análisis de clúster que consiste en un algoritmo de aprendizaje no supervisado para agrupar los municipios que presenten mayor similitud de dichos valores representativos. Tras ensayar distintas aproximaciones y tipos de agrupamiento, ha resultado muy difícil determinar una única zonificación debido a la distinta naturaleza de cada contaminante (por los procesos de emisión, dispersión y transformación de cada sustancia, etc.). Por lo tanto, se han definido dos tipos de zonificación: una con cinco zonas para dióxido de nitrógeno y partículas y otra con cuatro zonas para el ozono.
Izquierda: zonificación actual (Red de Calidad del Aire de la Comunidad de Madrid). Resto: propuestas conforme a la metodología desarrollada: dióxido de nitrógeno y partículas (centro) y ozono (derecha). Fuente: UPM.
Aunque esta nueva zonificación tiene un menor número de zonas que la actual, se ha comprobado que es capaz de identificar zonas con calidad del aire más homogénea estadísticamente. Igualmente, la separación entre las zonas ha quedado más clara; es decir, existen mayores diferencias entre zonas.
Por otro lado, se ha comprobado la compatibilidad de la propuesta con la red de las estaciones de medición ya existentes. La zonificación propuesta mejora la representatividad de las estaciones de vigilancia que miden la calidad del aire de forma continua en la región (por ejemplo, la nueva propuesta aumenta al menos un 20% la cobertura de las mediciones de dióxido de nitrógeno y partículas).
Los investigadores concluyen que “además de mejorar las características de la zonificación de la Comunidad de Madrid, nuestra técnica tiene la gran ventaja de ser cuantitativa y reproducible. Si se cuenta con una simulación precisa de la calidad del aire, esta metodología se podría extrapolar a otras regiones de España o Europa”.
Referencia bibliográfica:
Rafael Borge, Daeun Jung, Iciar Lejarraga, David de la Paz, José María Cordero. Assessment of the Madrid region air quality zoning based on mesoscale modelling and k-means clustering, Atmospheric Environment, Volume 287, 2022, 119258, ISSN 1352-2310. https://doi.org/10.1016/j.atmosenv.2022.119258