El apoyo social a hechos favorables es sin duda encomiable, pero la realidad observada es que a cuenta de la políticas climáticas sirven de pretexto pera exacciones fiscales y restricciones de todo tipo.
En la práctica el desplazamiento de un central eléctrico de carbón a un país limítrofe de la UE se considera algo positivo. Que en EEUU los combustibles fósiles tienen una fiscalidad extremadamente baja solo sirve a una competencia desleal en el comercio y la industria respecto a la UE.
Se evidencian cada vez más segundas intenciones que no se corresponden con el interés declarado de salvar el planeta. En año 2023 ha sido una año récord de producción de electricidad a partir del carbón lo cual deja a descubierto que los datos son muy distintos de la práctica real. La energía nuclear es una solución limpia y barata se están construyendo cientos de centrales en el mundo mientras España las rechaza por razones ideológicas.