"Se cierra el capítulo" en torno a la fecha de los restos hallados en Matalascañas
La última investigación desarrollada en torno al yacimiento litoral efímero descubierto en junio de 2020 en la playa de Matalascañas, en pleno parque natural de Doñana, en el que se localizaron las pisadas más antiguas del Pleistoceno de todo el mundo, ha fijado finalmente su antigüedad en unos 151.000 años.
Después de que el pasado mes de septiembre saliera a la luz en la revista Scientific Reports un estudio que elevaba de los 120.000 a casi 300.000 años aproximadamente la edad de esas huellas abriendo con ello la posibilidad de que correspondieran a homínidos pre-neandertales, de los que no se tenían rastro en la Península Ibérica, ahora, una publicación en Quaternary Science Reviews rebate esa datación y la fija "sin dudas" en unos 151.000 años, correspondiendo por tanto a neandertales que era lo que en un principio determinaron los expertos.
Así lo ha indicado a EFE Joaquín Rodríguez Vidal, profesor del Departamento de Geodinámica y Paleontología de la Universidad de Huelva y uno de los autores de este último artículo, con el que "se cierra el capítulo" en torno a la fecha de esas huellas.
Para esta datación definitiva, ha indicado, se recolectaron cuatro muestras de sedimentos y se aplicó OSL, una técnica de luminiscencia de los cristales de cuarzo y feldespato, que se usa para dataciones de más de 50.000 años.
Estas muestras fueron recogidas por expertos del Laboratorio de Datación por Luminiscencia del Centro Nacional de Investigaciones sobre la Evolución Humana (CENIEH), un centro de referencia, donde posteriormente se procesaron quedando clara toda las secuencia de edades de este yacimiento y "todo está en torno a 150.000 años".
"Esta datación más precisa hace que las huellas sean un poco más antiguas de lo que consideramos en un principio, unos 120.000 años", ha remarcado Rodríguez Vidal.
Pero además, ha añadido, ha aparecido, gracias a la labor de rastreo realizada por técnicos del Espacio Natural de Doñana, industria lítica en el sitio que no está retrabajada que es de neandertales también.
"Se trata de industria musteriense, realizada, además, con unas piezas líticas que son de allí del entorno, es decir, que no las traían consigo", ha apuntado.
Y es que la zona donde apareció el yacimiento era por aquella época "un sitio de paso, un cazadero y zona de agua encharcada con mucha fauna, de forma que cuando los homínidos llegaban a ella allí mismo hacían la industria y cazaban y consumían para después seguir, al ser trashumantes".
Una vez cerrado el capítulo de la datación de los huellas de los homínidos, y después de haber descubierto en este yacimiento huellas de grandes elefantes o grandes toros, su riqueza no termina ahí, ya que, según el experto, aún quedan muchas más por descubrir en las que se están trabajando.
Fotografía de portada: Una de las huellas de pisadas de neandertales halladas en Matalascañas / UNIVERSIDAD DE HUELVA