El Laboratorio de Análisis del Movimiento, Biomecánica, Ergonomía y Control Motor (LAMBECOM) de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) está llevando a cabo un proyecto para evaluar el deterioro de esta enfermedad y detectar marcadores que permitan minimizar el riesgo de caídas
El proyecto NEUROMARK (Biomarcadores neuromecánicos para cuantificar la gravedad de la enfermedad de Parkinson utilizando sensores vestibles) se centra en el análisis de la marcha de los pacientes con enfermedad de Parkinson (EP) sobre diversos terrenos. El principal objetivo de esta investigacion es detectar marcadores de deterioro precoz de esta patología que permitan detectar el riesgo de caídas.
Hasta la fecha, se han analizado más de 40 personas con EP y más de 20 individuos sin patología (grupo de control). Los resultados preliminares muestran que, las personas con EP con una afectación de leve a moderada tienen capacidad de adaptarse a terrenos irregulares, pero de distinta forma a como lo realizan las personas sin patología.
El protocolo experimental se realiza en el laboratorio LAMBECOM de la URJC, un espacio acondicionado para tomar las medidas y realizar análisis de los parámetros de marcha. Las pruebas se llevan a cabo sobre diferentes terrenos (llano, irregular e inestable) y se realizan dos repeticiones, una ida y una vuelta caminando, incluyendo un giro, sobre cada superficie.
“La sesión consiste en registrar la actividad biomecánica y muscular de pacientes e individuos sanos durante la marcha, mediante un sistema de análisis tridimensional del movimiento (VICON motion system®), sensores inerciales, un sistema de electromiografía de superficie (Delsys), además de escalas clínicas”, explica Francisco Molina-Rueda, profesor de Fisioterapia e investigador del grupo LAMBECOM.
Establecer nuevas formas de evaluación fundamentadas en datos objetivos mejorar el pronóstico de los pacientes
Los resultados que se han obtenido hasta ahora muestran que las personas con EP disminuyen la oscilación de los miembros superiores cuando caminan sobre terrenos inestables como una colchoneta. “Esto podría tener algunas repercusiones funcionales como, por ejemplo, que exista un mayor riesgo de caídas en situaciones de la vida cotidiana que conlleven inestabilidad, ya que el braceo es un movimiento que nos aporta estabilidad cuando caminamos”, señala el profesor Molina-Rueda.
La detección precoz de este riesgo permitirá la prevención de las caídas y, en definitiva, asegurará la independencia de estas personas durante más tiempo. Tal y como concluye el investigador de la URJC: “Esperamos que, cuando se complete el estudio longitudinal y se analicen los datos de todas las articulaciones y músculos, podamos establecer un patrón de marcha de las personas con EP en diferentes superficies. Esta información nos permitirá encontrar marcadores o alteraciones en el patrón de marcha para prevenir el riesgo de caídas”. El proyecto NEUROMARK está financiado por el programa de Generación de Conocimiento del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y está coordinado por el Centro de Robótica y Automática del CSIC.
Referencia bibliográfica:
V. Navarro-López, D. Fernández-Vázquez, F. Molina-Rueda, et al. “Arm-swing kinematics in Parkinson's disease: A systematic review and meta-analysis”, Gait Posture, 2022,98, pp. 85-95. P. Meyns, S.M. Bruijn, J. Duysens. “The how and why of arm swing during human walking”, Gait Posture, 2013,38(4), pp. 555-562. S. Mainka, M. Lauermann, G. Ebersbach. “Arm swing deviations in patients with Parkinson's disease at different gait velocities “, J Neural Transm (Vienna), 2023;130(5), pp. 655-661. T. Killeen, M. Elshehabi, L. Filli, et al. “Arm swing asymmetry in overground walking”, Sci Rep, 2018;8(1), pp. 12803. F. Molina-Rueda, M. Carratalá-Tejada (Eds.), “La marcha humana Biomecánica evaluación y patología”, 1st ed., Médica Panamericana., Madrid, 2020, pp. 111–121
