Esperando que la aspirina
Una modesta aspirina constituye el motor impulsor del poema, actuando como catalizador de la reflexión y el desarrollo poético posterior que nos lleva a en uno de esos momentos insondables (e indeseados) en que uno 'piensa en su vida' y se descubre indefenso y perplejo ante el tiempo que va pasando y sus efectos. Así que comenzamos este nuevo curso de poesía y ciencia; con <i>Esperando que la aspirina</i> del destacado poeta argentino Fabián Casas, cuya obra poética es sorprendente y áspera, inteligente y viva. Toda ella de un muy alto nivel.<br /><br />Más información en el blog <a href="/blogs/CienciayPoesia/2017/09/12/88734" alt="La Alegría de las Musas 2" alegr="" de="" las="" musas="" target="blank">La Alegría de las Musas 2</a>
Esperando que la aspirina
Esperando que la aspirina empiece a trabajar,
que acomode los cuartos, que revuelva el café
y que traiga a mi madre, fresca
a esta tarde de agosto
hojeo revistas estúpidas, escucho discos viejos
me pregunto en qué momento
los dinosaurios sintieron
que algo andaba mal.
Fabián Casas
Buenos Aires, 1965