Dice Blojintsev: No existe partícula alguna libre, aislada,
abandonada a sí misma. Aun en el caso de que las partículas estén
considerablemente alejadas unas de otras, siguen perteneciendo al
medio que las ha creado y que se encuentra en un estado de
movimiento continuo.
Soy múltiple. No yo.
Soy un enjambre.
Soy todos-nadie.
Soy un millón,
mil millares de millones
de células, sistemas, micro-objetos.
Soy todo
menos un yo.
Soy un sistema
de ordenación abstracta
como Dios.
Todo funciona,
no sé por qué.