• Gamma-6

    Tenemos que irnos acostumbrando a un nuevo modo de ver las cosas y a hablar de las partículas atómicas como antes se hablaba de dientes-perlas, labios-rubís y otras micro-metáforas. Así volveremos a ser los saludables tontos de siempre, renovados por una sorpresa provisional.


    Siempre vemos al hombre biológicamente
    (las células, etcétera...),
    nunca como un conjunto eléctrico de cargas.

  • Homenaje a ramón y cajal

                                                                  A Mercè Durfort

    Barcelona, 1888: Santiago Ramón y Cajal
    observa por primera vez las neuronas



    Ni cables ni vasos: células,
    una tras otra, una al Iado de otra,
    células como árboles, como pirámides,

  • Heráclito

    El segundo crepúsculo.
    La noche que se ahonda en el sueño.
    La purificación y el olvido.
    El primer crepúsculo.
    La mañana que ha sido el alba.
    El día que fue la mañana.
    El día numeroso que será la tarde gastada.
    El segundo crepúsculo.
    Ese otro hábito del tiempo, la noche.
    La purificación y el olvido.
    El primer crepúsculo...
    El alba sigilosa y en el alba
    la zozobra del griego.
    ¿Qué trama es ésta
    del será, del es y del fue?
    ¿Qué río es éste
    por el cual corre el Ganges?
    ¿Qué río es éste cuya fuente es inconcebible?
    ¿Qué río es éste
    que arrast

  • Cantar

             Dicen que el ave divina
    trocada en pobre gallina,
    por obra de las tijeras
    de aquel sabio profesor
    (fue Kant un esquilador
    de las aves altaneras;
    toda su filosofía,
    un sport de cetrería),
    dicen que quiere saltar
    las tapias del corralón,
    y volar
    otra vez, hacia Platón.
    ¡Hurra! ¡Sea!
    ¡Feliz será quien lo vea!

  • Angina de pecho

    Si la mitad de mi corazón está aquí, doctor,
    la otra mitad está en China,
    en el ejército que desciende hacia el Río Amarillo;
    y, luego, todas las mañanas, doctor,
    todas las mañanas, al alba,
    mi corazón es fusilado en Grecia.
    Y después, cuando los prisioneros caen en el sueño,
    cuando los últimos pasos se alejan de la enfermería,
    mi corazón se va, doctor,
    hasta una vieja casa de madera en Estambul.
    Además, hace diez años, doctor,
    que yo no tengo nada en las manos para ofrecer a mi pueblo;
    únicamente una manzana roja.

  • Heráclito

    El segundo crepúsculo.
    La noche que se ahonda en el sueño.
    La purificación y el olvido.
    El primer crepúsculo.
    La mañana que ha sido el alba.
    El día que fue la mañana.
    El día numeroso que será la tarde gastada.
    El segundo crepúsculo.
    Ese otro hábito del tiempo, la noche.
    La purificación y el olvido.
    El primer crepúsculo?
    El alba sigilosa y en el alba
    la zozobra del griego.
    ¿Qué trama es ésta
    del será, del es y del fue?
    ¿Qué río es éste por el cual corre el Ganges?
    ¿Qué río es éste cuya fuente es inconcebible?

  • Gamma-5

    Dice Blojintsev: No existe partícula alguna libre, aislada,
    abandonada a sí misma. Aun en el caso de que las partículas estén
    considerablemente alejadas unas de otras, siguen perteneciendo al
    medio que las ha creado y que se encuentra en un estado de
    movimiento continuo.


    Soy múltiple. No yo.
    Soy un enjambre.
    Soy todos-nadie.
    Soy un millón,
    mil millares de millones
    de células, sistemas, micro-objetos.
    Soy todo
    menos un yo.
    Soy un sistema
    de ordenación abstracta
    como Dios.
    Todo funciona,
    no sé por qué.

  • Cero-fragmento-

    Invitación al llanto.

  • Velocidad de los átomos

    Ahora qué velocidad se les ha otorgado a los cuerpos de la
    materia, de lo que sigue, Memmio, puedes conocer en pocas
    palabras. En primer lugar cuando la aurora inunda las tierras con
    su nueva luz y los variopintos pájaros, volando por apartados
    bosques, a través del suave aire llenan los lugares con sus
    límpidos trinos, cuán súbitamente suele el sol al nacer en tal
    momento envolverlo todo bañándolo con su luz vemos que es
    para todos claro y manifiesto.

  • Teoría cuántica

    El calor irradiado -lo mismo por una fogata campestre
    que por las explosiones atómicas al centro del sol-
    no forma un flujo continuo:
    se parece más al latir del corazón
    que al pausado tránsito de un río,
    porque la radiación procede por saltos cuánticos.

    Tal vez nuestro conocimiento
    proceda de la misma forma.
    Que en el campo de la física
    se haya asignado números enteros
    a cada uno de estos saltos,
    y que en las distintas tradiciones
    existan rituales de iniciación para cada pasaje,
    en nada altera el fenómeno fundamental.