• Poema entrópico nº 1

  • Ciencias

    No sé calcular el trabajo que realiza una fuerza,
    me importa una mierda la ley de Lavoisier:
    la energía la destruyo yo sin trabajo siquiera.
    Es una idiotez ver un julio con la fuerza de un newton
    en la distancia de un metro
    y, además, no quiero cambiar las cosas de sitio.
    La vagoneta que me jodió en 7º
    de 150 Kg. de masa a 2m/s
    y su energía cinética no me sirvieron de nada.
    La vagoneta me importaba un pepino,
    me gustaba la mina, la explotación,
    el dinero en cuarzo.

  • Teoría de conjuntos

    En un cuarto a oscuras se enciende una vela.
    Todo 10 que en ese cuarto existe
    se ve de pronto iluminado por un flanco
    y proyecta sombra por el otro.
    Todo lo que tiene luz tiene sombra.
    La luz y la sombra van de la mano.
    Pero, si la llama misma no tiene sombra,
    ¿De veras tiene luz la llama de la vela?

  • Beta-6

    Todo invita a la humildad. Los poetas sólo duramos en cuanto
    desaparecemos o nos transformamos en otros que, hasta negándonos,
    viven de lo que fuimos en cuanto nos presuponen. Son pequeñas
    lecciones atómicas.

    Un acelerador de partículas dispara.
    Surgen, bombardeados, micro-objetos
    inestables: Poemas: Aparatos verbales.
    ¿Es la explosión total? ¿Es la gloria
    o es tan sólo un mesón lambda?
    ¡Oh secreta radiación!, noche plena
    que un día teclearon con palabras
    cuidadosas los líricos del alma,
    y ahora da miedo advertir

  • La casa de salud

    Una casa de salud
    del barrio de Montsouris
    la contemplo con frecuencia
    al pasear por allí,
    y la veo tan sombría,
    tan miserable y tan gris,
    que me produce impresión
    de casa de folletín.
    Tiene una traza siniestra,
    torva, misteriosa, hostil,
    con sus balcones cerrados
    y su pequeño jardín.
    ¿Quién puede buscar salud
    en un edificio así,
    si sólo ver esa casa
    produce a cualquiera esplín?

    Yo pienso, con cierto espanto,
    que algo se debe encubrir
    tras esas paredes tristes
    de este rincón de París.
    Supongo gente encerrada

  • Terceto hecho para los cuerpos regulares y sus derivados

    El dulce fruto bello y su deleite
    A buscar al filósofo ha impelido
    La causa nuestra por nutrir la mente.

  • Wilhelm reich

    En aquel verano del 37 se sintió casi feliz. En Oslo,
    noches blancas, barcas en el fiordo, beber dorado aquavit
    en el Café del Teatro con Sigurd, Nic y Arnulf. A petición
    tocó el violinista el Bolero de Ravel. La gente susurraba:

    ¡Así es él! Naturalmente tenían razón, obviamente
    estaba loco, un enfermo furibundo, que ahuyentaba
    a todos sus amigos: con malas artes les arrancaba
    (oh, sombra de Stalin) confesiones escritas (a esos traidores),

    que cerraba con llave en su escritorio. (Sí, también

  • Suma

    La sorpresa  de lo improbable            +  la aparente seguridad  de lo metódico,            +  el fulgor  de lo nuevo,            +  la belleza  de lo efímero,            +  la abreviada alquimia  de lo sexuado,            +  la levedad molecular  de lo dominante,            +  la paz en fuga  de lo maduro,            +  la certeza  de lo mineral.    El todo  menos que la suma  de los dispares elementos.  El dios debía saberlo.

  • A marcelino menendez y pelayo ((<<in memoriam>> ))

    Padre y Maestro, si el saber no fuera
    la mejor gala de la estirpe humana,
    de tu sabiduría sobrehumana
    la suma gloria el mundo recibiera.

    Cristiano y español, tu magisterio
    hizo saber al Orbe, en maravilla,
    que, mientras suena el habla de Castilla,
    nunca se pone el sol en nuestro Imperio

    Eras tú, cuando toda nuestra gloria
    en tu obra ingente revivir supiste;
    cuando del claro ayer fuiste el espejo...

    Cuando dabas lecciones a la Historia...
    Y eras tú,¡todo tú! Cuando dijiste
    <<Yo guardo con amor un libro viejo... >>

  • Teoría de la relatividad

    Los problemas no se resuelven,
    sólo van ocupando menos y menos espacio.
    Los problemas son reales, pero tienen límites.
    Los problemas no crecen,
    lo que crece es la conciencia de ser,
    la visión.
    Los problemas cambian constantemente de forma.
    La visión no; conserva siempre
    la misma forma,
    pero cambia de tamaño.

    Por eso resulta correcto decir
    que sólo el error cambia,
    como también es cierto
    que la visión es totalmente fluida
    y que allá fuera hay un viento terrible
    y que su capacidad de transformación es asombrosa.