El periodo de lactancia prorrogado a los dos años, según recomienda la <a href="https://www.who.int/topics/breastfeeding/es/" title="Organización Mundial de la Salud" alt="Organización Mundial de la Salud" target="blank">Organización Mundial de la Salud</a> (OMS), "se aproxima a lo que sucedía con los primeros <i>Homo sapiens</i>" que, pese a los millones de años que nos distancian de ellos y a una "inmensa brecha tecnológica" todavía pueden ofrecernos "lecciones del pasado", también, en la crianza.
Así queda reflejado en Pequeños Pasos, creciendo desde la prehistoria, un libro escrito por el paleoantropólogo Jose María Bermúdez de Castro y la pediatra Elena Bermúdez de Castro, quienes han unificado ambas disciplinas para averiguar cómo ha evolucionado la crianza a lo largo de los millones de años que ha vivido nuestra especie. "Hace siete millones de años la crianza no era muy diferente a la que podemos observar hoy día en los grupos de chimpancés, bonobos y otros parientes vivos que tenemos los humanos", ha afirmado a EFE el que fuera codirector de las excavaciones de Atapuerca y Premio Príncipe de Asturias, Jose María Bermúdez de Castro.
Sin embargo, ambos expertos han destacado dos rasgos como principales diferencias entre la forma de cuidar de los pequeños en épocas de los primeros homínidos y en la mayoría de las sociedades actuales: por una parte, la crianza colectiva, en la que "el clan en su conjunto se hacía cargo de los niños del grupo" y, por otra, el periodo de lactancia, "entonces mucho más largo que el actual". El periodo de lactancia en las sociedades primitivas duraba "hasta los cuatro años y medio del lactante", ha precisado el paleoantropólogo, y ha señalado a la selección natural como el principal motivo por el que este periodo se ha ido acortando con el paso del tiempo.
"Si la lactancia dura mucho, una madre puede tener menos cantidad de hijos, ya que este tipo de alimentación produce una hormona -la prolactina- que inhibe la ovulación, por lo que se amplía el intervalo promedio de nacimiento", ha detallado este experto. La selección natural, pues, nos sacó de ese "arrolladero demográfico", de modo que "empezamos a tener hijos con más frecuencia y, por tanto, en más cantidad". Este experto considera que, incluso, "se nos ha ido un poco de las manos", de modo que ahora somos unas siete mil millones de personas en el mundo gracias a esta "expansión demográfica" propiciada "ahora también, por la selección cultural".
Por su parte Elena Bermúdez de Castro ha apuntado que, al margen de esta hormona, "se ha comprobado que la lactancia tiene múltiples ventajas tanto para la madre como para el bebé", en tanto que "favorece su crecimiento, su inteligencia y le previene de numerosas infecciones durante ese momento y a largo plazo". Pese a las recomendaciones de los especialistas, la pediatra ha asegurado que "acortamos el periodo de la lactancia, entre otros motivos, por presiones externas e influencias socioculturales actuales", como la "temprana incorporación de la mujer al trabajo" tras la baja por maternidad.
"Al incorporarse al trabajo, la mujer puede dar menos veces el pecho al bebé, tiene que empezar a sustituirlo por el biberón y el periodo de lactancia se acorta", pues "cuanto menos lacta el niño, menos leche se forma", ha argumentado. En España, la baja por maternidad es de 16 semanas y, por tanto, es inferior a los aconsejados seis meses de lactancia, ha detallado Bermúdez de Castro (hija). Esta especialista además ha lamentado que, en ocasiones, las mujeres se enfrentan a una disyuntiva de "dar el pecho o trabajar como lo hacían antes del parto" y ha reclamado que el contexto sociolaboral "pueda incidir en la decisión de una madre de optar por su carrera profesional en detrimento del amamantamiento", por lo que, sostiene, "hay que elevar una protesta en el mercado de trabajo español".