Entrevista a Gema Climent. Fundadora y directora de <a href="https://nesplora.com/estudio-normativo-de-nesplora-aquarium/" title="Nesplora Technology and Behaviour" alt="Nesplora Technology and Behaviour" target="_blank">Nesplora Technology and Behaviour</a>, una pyme española especializada en el análisis del comportamiento humano.
Independientemente de cuál sea la enfermedad o el problema de salud, el diagnóstico nunca es una experiencia agradable para los pacientes. Si se sospecha de la existencia de un trastorno mental, por ejemplo, las personas afectadas deben someterse a controles y pruebas de todo tipo para determinar cuál es su estado y las posibles opciones de tratamiento. Además del temor a los resultados, esto a menudo es una experiencia desagradable y estresante.
Entonces llegó Nesplora Technology and Behaviour y sus herramientas de valoración de trastornos mentales basadas en la RV: un conjunto formado por unos auriculares y unas gafas de realidad virtual que permiten al paciente acceder a un entorno virtual. La reacción a los estímulos y la capacidad de llevar a cabo tareas específicas en este entorno permitirá obtener fácilmente un diagnóstico, y ofrecerá a los médicos información suficiente para escoger la mejor opción de tratamiento posible.
Gema Climent, fundadora y directora de Nesplora Technology and Behaviour, habla de la tecnología del proyecto VRMIND (Virtual Reality based Evaluation of Mental Disorders) y de los planes actuales y futuros de la empresa.
¿Cuáles son las ventajas de la RV para evaluar los trastornos mentales?
Por un lado, las nuevas tecnologías nos permiten evaluar los procesos cognitivos con una objetividad inalcanzable con las pruebas tradicionales realizadas con papel y lápiz. Sabemos lo que medimos en cada momento y lo registramos para su posterior interpretación.
Más específicamente, el valor añadido de la RV es la validez ecológica que contribuye a la evaluación neuropsicológica, es decir, la capacidad de una herramienta de reflejar el verdadero estado de un paciente en la vida real. Al evaluar las funciones cognitivas en un entorno que simula la vida real, podemos predecir de forma más precisa cómo funciona el cerebro del paciente. Entonces podemos transferir los resultados de una evaluación objetiva a un entorno real.
¿Nos puede hablar sobre las diversas herramientas que han desarrollado?
Hasta el momento, hemos desarrollado y comercializado una herramienta que evalúa los procesos de atención en niños de entre 6 y 16 años de edad mediante tareas realizadas en un aula virtual. Se llama Nesplora Aula. Además, disponemos de una variante de esta herramienta, Nesplora Aula School, que no se centra tanto en el ámbito clínico, sino en el educativo. Su función es identificar los puntos fuertes del alumno en materia de atención para reforzar su proceso de aprendizaje.
Por otro lado, Nesplora Aquarium sirve para evaluar la atención y memoria de trabajo en adultos. En este caso, el entorno emula un acuario donde la persona debe realizar diferentes tareas.
Actualmente, estamos desarrollando dos herramientas de evaluación adicionales para pacientes mayores de 16 años. Nesplora Ice Cream ha sido pensada para evaluar las funciones ejecutivas mediante ejercicios realizados en una heladería virtual. Por otro lado, Nesplora Suite se centra en valorar los procesos de la memoria; para ello, el paciente entra en una tienda de muebles.
¿Cómo se integran y comparan estas soluciones con otros enfoques del diagnóstico, tales como la neuroimagen?
Para obtener un diagnóstico, el profesional suele basarse en pruebas y criterios de diferentes tipos. En el ámbito de la salud mental, dependiendo del trastorno en cuestión podemos emplear pruebas neuropsicológicas, técnicas de neuroimagen, pruebas de carácter más psicológico, etc. Los bueno de esta variedad de técnicas es que se complementan entre sí. Nos proporcionan información diferente y permiten un análisis más preciso.
La neuroimagen, por retomar su ejemplo, en el caso de la demencia suele complementarse con pruebas neuropsicológicas. Esto ayuda al profesional a determinar el tipo de demencia de un paciente, que depende tanto de la zona del cerebro que parece estar afectada como de las funciones cognitivas que presentan alteraciones.
¿Cómo han comprobado la tecnología y qué nos puede decir de los resultados de estas pruebas?
Todas las herramientas que desarrollamos en Nesplora Technology and Behaviour tienen una base científica y llevamos a cabo diferentes estudios para validarlas científicamente.
Por un lado, disponemos de estudios normativos que nos permiten determinar la curva de normalidad para cada grupo de edad y género. Así, podemos comparar los resultados de un paciente con los de su grupo de referencia para saber si están dentro de la media o, por el contrario, se desvían de esta. Disponemos de numerosas muestras que nos permiten obtener resultados fiables en los estudios. En el caso de Nesplora Aula, hemos desarrollado escalas para cada género en los siguientes rangos de edad: 6-7, 7-8, 9-10, 11-12 y 12-14. En el caso de Nesplora Aquarium, hemos identificado tres rangos de edad diferentes para cada género: 16-40, 41-60 y superior a 61. En ambos casos, los resultados obtenidos coinciden con la teoría.
Por otro lado, también realizamos estudios clínicos consistentes en comprobar la capacidad de diferenciación entre diversos trastornos y sus subtipos. Nesplora Aula se centró en pacientes con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y otros trastornos del desarrollo neurológico. En estudios convergentes, no obstante, intentamos comparar nuestras pruebas con otras empleadas como referencia hasta la fecha. Todavía estamos desarrollando estos dos tipos de estudios para Nesplora Aquarium, dado que esta herramientas es muy reciente.
¿Qué opiniones han recibido de los profesionales del sector hasta el momento?
Es verdad que muchas veces hemos observado cierta reticencia por parte de los profesionales a la hora de incluir nuevas tecnologías en su «maletín de herramientas». Este primer obstáculo se debe a una falta de conocimientos, pero una vez que descubren nuestras herramientas, las impresiones son muy positivas.
Los comentarios más habituales están relacionados con la velocidad a la que se realizan las pruebas y su sencillez. Además, un punto fuerte para nuestros clientes es la buena acogida entre los pacientes, dado que la utilización de entornos virtuales hace que nuestras herramientas les resulten más interesantes y mejora su motivación para someterse a la evaluación.
¿Cuáles son sus planes de comercialización?
Queremos alcanzar una democratización global de nuestras herramientas mediante el canal profesional de la neuropsicología, la psiquiatría y la neurología. Nuestro segmento de clientes está centrado en un sector clínico, principalmente en un colectivo profesional de neurocientíficos, pero también hospitales, farmacéuticos, aseguradoras, etc. Existe otro sector que ampliará considerablemente el alcance de nuestra empresa y en breve lanzaremos nuevos productos destinados a él.
