Carlos Magro<br/>Director de la Oficina de Información Científica de la Comunidad de Madrid
Detrás de eventos tan consolidados como la Feria Madrid es Ciencia o la Semana de la Ciencia, que se celebran cada año en nuestra región, se encuentra un equipo de trabajo encargado de gestionar un sinfín de actividades orientadas a acercar la ciencia al ciudadano. Al frente, Carlos Magro Mazo, Director de la Oficina de Información Científica de la Comunidad de Madrid.
1.- ¿Cómo surge la iniciativa de crear una Oficina de Información Científica en la Comunidad de Madrid?
La Oficina de Información Científica es parte del Programa Ciencia y Sociedad que surgió hace una década en el contexto del II Plan Regional de Investigación de la Comunidad de Madrid. En aquel momento prácticamente no existían iniciativas a nivel político para abordar los temas que tenían que ver con ciencia y sociedad. Se trata de un programa verdaderamente innovador porque por primera vez se planteaba que la política científica no era solo una cuestión de becas, proyectos e infraestructuras sino que también era necesario buscar mecanismos de democratización de la ciencia y crear herramientas que fomentaran la cultura científica e incentivaran la participación ciudadana en cuestiones científicas.
En estos diez años el programa ha evolucionado y, sobre todo, se ha ido materializando en proyectos concretos, como la Feria Madrid es Ciencia, que este año ha celebrado su octava edición, la Semana de la Ciencia, con siete ediciones a sus espaldas y, más recientemente, la Oficina de Información Científica, desde donde gestionamos toda una serie de contenidos informativos a través del Sistema madri+d.
2.- ¿Cuáles son sus principales objetivos y filosofía?
La filosofía fundamental de todo el Programa y de la Oficina es acercar la ciencia a los ciudadanos. En un principio esto puede entenderse como la necesidad de incrementar los conocimientos que los ciudadanos tienen sobre la ciencia y la investigación que se realiza en la Comunidad de Madrid, sin embargo siempre hemos tenido claro que éste no puede ser nuestro único objetivo. Tenemos que conseguir que los ciudadanos, los investigadores y la sociedad en general entiendan que la ciencia es el elemento clave para nuestra vida y nuestra cultura en la actualidad. No es que la ciencia sea cultura, sino que nuestra cultura es la cultura de la ciencia. No se trata de saber más, sino de generar actitudes de diálogo en torno a la ciencia y la tecnología.
Inicialmente el programa se llamaba Cultura Científica y Participación Ciudadana. Una denominación que intenta reflejar la necesidad de hacer partícipe a toda la sociedad –a los investigadores, a los políticos, a los empresarios, a los ciudadanos, etc., cada uno en su papel- de cuestiones que son absolutamente globales, como por ejemplo el problema energético, una situación que no se puede resolver solo con un buen urbanista, un buen ciudadano o un buen político. Este programa pretende crear las herramientas necesarias para que la ciencia sea cuestión de todos.
3.- ¿Qué organismos o entidades participan o colaboran con la Oficina?
Prácticamente todo el sistema de ciencia y tecnología de la Comunidad de Madrid. A nivel práctico el funcionamiento de la Oficina se basa en acuerdos de colaboración y convenios con las universidades públicas de la región y con los principales centros de investigación. Las empresas participan interviniendo en las diversas actividades que organiza la Oficina, como la Feria Madrid es Ciencia y la Semana de la Ciencia, principalmente.
4.- Entre los eventos que promociona se encuentra la Feria Madrid es Ciencia, La Semana de la Ciencia y el Concurso de Fotografía. ¿De qué manera contribuyen estas actividades a acercar la ciencia a la ciudadanía?
Todos estos eventos comparten el objetivo general de acercar la ciencia al ciudadano, pero cada uno de ellos tiene sus singularidades. La Feria tiene una gran cualidad que es la deslocalización, es decir, en un lugar neutral colocamos desde niños muy pequeños hasta empresarios, pasando por investigadores. Todos se encuentran en un espacio que no es el habitual para ellos y todos ellos tienen que hacer un esfuerzo por comunicarse con los ciudadanos. En la Semana lo que se pretende es enfrentar -en el buen sentido de la palabra- a los ciudadanos con gente que hace ciencia y tecnología. La ventaja para los investigadores es que ahora sí que están en su laboratorio, reciben en su ‘casa’ al invitado y pueden preparar el decorado. La ventaja para los ciudadanos es que pueden entrar en sitios normalmente ocultos, en un laboratorio de un hospital, de un centro de investigación, en la cadena de producción de una empresa. Ven la ciencia como una empresa normal. Con el concurso de fotografía lo que intentamos es que los participantes hagan un esfuerzo por ver la ciencia de una manera diferente, más amable quizá, inmortalizando desde el exterior los lugares donde se realiza la ciencia, es decir, los lugares con los que yo como ciudadano me encuentro cuando paseo. Se trata de plasmar la ciencia de una manera territorial. Ubicar la ciencia en el espacio que nos rodea.
5.- ¿Además de estos tres grandes eventos que otros servicios o contenidos ofrece la Oficina?
Desarrollamos una gran cantidad de contenidos diferentes a través de la página web del Sistema madri+d. Fundamentalmente son noticias, artículos de opinión, análisis, entrevistas, reseñas de libros y exposiciones, documentación sobre el patrimonio de la región, una red de museos, etc. El soporte y el tipo de público al que van destinados estos contenidos es quizá lo que los diferencia de la Feria. Nos encontramos ante los mismos temas que nos interesa abordar en la Feria, como por ejemplo el medio ambiente, pero tratados de una manera más profunda y reflexiva. Uno de los servicios más recientes es la blogosfera de madri+d. Se puso en marcha hace dos años y hoy ya cuenta con más de 50 blogs diferentes agrupados en una misma página y dirigidos por expertos que están hablando de temas tan diversos como la bioética, la ciencia de los suelos, la ciencia marina, la salud pública, la nanotecnología, el agua o la energía, entre otros. Su crecimiento ha sido tan espectacular, casi un millón y medio de accesos el último mes, que está demostrando que hay lectores para todo el mundo, en sitios insospechados y en cantidades, a veces, abrumadoras.
Acabamos de abrir una videoteca que pretende ser un espacio donde se hagan accesibles al público general una gran cantidad de las conferencias y mesas redondas que todos los días se celebran en Madrid y que tienen su público, pero que una vez celebradas, desaparecen. Es un nuevo esfuerzo por hacer accesible a todos el conocimiento.
6.- Tras dos años al frente de la Oficina de Información Científica en la Comunidad de Madrid, ¿cómo valoraría los resultados del trabajo desarrollado durante este periodo?
El programa es un trabajo de colaboración en el que está implicada mucha gente. La prueba de que funciona bien es que se están implantando modelos similares en otros lugares. Por ejemplo, la Feria Madrid es Ciencia, que surgió en la Comunidad hace ocho años, es el mismo modelo que se ha implantando -o se está implantando- en otras comunidades autónomas como Andalucía, Baleares, Aragón, Zaragoza o Murcia. La Semana de la Ciencia, sin embargo, surgió primero en Cataluña, después en Madrid y ya se ha extendido a todo el territorio. Estos son dos ejemplos de actuaciones concretas que se trasladan a otros sitios por su éxito consolidado y el interés que despiertan en al sociedad.
7.- ¿Cuáles son sus retos y perspectivas futuras?
Nuestras perspectivas son seguir trabajando y creando nuevos proyectos. En cuanto a los retos, creo que tenemos una gran tarea pendiente que es conseguir instrumentos de participación ciudadana en ciencia y tecnología. Eso significa idear la forma en que los científicos, investigadores, gestores políticos y ciudadanos puedan trabajar juntos para decidir el futuro: lo que se va a investigar, por qué, cómo y para qué.
Autor: Elena Higueras