Brian Eno, uno de los músicos más innovadores de nuestra época, es un apasionado por el conocimiento en todas sus formas
Brian Eno saltó a la fama en los años 70 como integrante del grupo Roxy Music. Después, su interés por la electrónica le hizo despuntar en varios otros proyectos musicales. A pesar de ello, Eno se describe a sí mismo como un “no músico” y sus intereses van mucho más amplios .
Uno de esos intereses es la ciencia. Una de sus frases célebres es “La ciencia descubre, el arte digiere”. También ha argumentado que “la industria creativa debe ayudar a inspirar la acción climática”. En 2019 recibió la Medalla de Comunicación Científica Stephen Hawking.
Eno es además un apasionado del Juego de la Vida, un juego matemático desarrollado en los años 60 y que permite entender cómo se puede originar complejidad a partir de normas muy simples. Preguntado sobre el juego hace años en una entrevista respondió esto:
“Estamos acostumbrados a la idea de que todo lo complejo debe surgir de algo más complejo. Los cerebros humanos diseñan aviones, no al revés. El Juego de la Vida nos muestra organismos virtuales complejos surgidos de la interacción de unas pocas reglas simples. Adiós Diseño Inteligente.”
Os dejamos dos entrevistas (aquí y aquí) en las que Eno habla de su interés en la ciencia.
Foto de portada: Scott Beale