La actividad docente en el tránsito del siglo XIX al XX planteaba la necesidad de mostrar en el aula estructuras biológicas no visibles directamente de la naturaleza. En un medio universitario pobre, en el que la enseñanza práctica no estaba generalizada, el alumno apenas estaba familiarizado con el microscopio ni con las imágenes que se podían ver a través de él.
En esos años existían, no obstante, linternas mágicas y colecciones comerciales de placas de cristal para ser proyectadas. Estas colecciones, todas procedentes de la importación, solían incluir series de carácter artístico, paisajes naturales y ejemplos de maquinaria, rara vez detallaban la estructuras anatómicas y morfológicas observables al microscopio.
Lámina de la colección Gómez Pamo
Para solventar esta carencia el profesor debía tener dotes de ilustrador sobre el encerado. En ocasiones, para mostrar imágenes con suficiente detalle el profesor elaboraba dibujos en gran formato sobre papel que, enmarcados, eran utilizados como material docente. Este es el caso de la colección didáctica “Gómez Pamo” de Farmacognosia conservada en la Universidad Complutense, elaborada por este profesor en 1912.
Juan Ramón Gómez Pamo fue catedrático de Materia Médica Farmacéutica en la Universidad Central desde 1889 hasta su fallecimiento en 1913. Fue fundador de la Sociedad Histológica de Madrid y perteneció a diversas academias y sociedades científicas.
Izquierda: Juan Ramón Gómez Pamo (1846-1913). Derecha: Detalle de la firma de Juan Ramón Gómez Pamo en una de las láminas de su colección
Los dibujos de la colección, cercanos a los noventa, fueron montados sobre un fino tablero. El conjunto de las láminas incluye diferentes tipos de células vegetales, granos de polen y esporas, estructuras histológicas de raíces y rizomas, cortezas, hojas, etc, bajo luz blanca y polarizada.
Izquierda: láminas mostrando conductos secretores de la colección Gómez Pamo. Derecha: láminas mostrando cortes de tallo de helecho y monocotiledónea de la colección Gómez Pamo
Las láminas están seriadas de manera acorde con el programa de la asignatura de “Materia farmacéutica vegetal” a la que servían de sustrato docente; comienzan mostrando las estructuras celulares, vasos, fibras y glándulas, siguen las raíces y rizomas -de especies medicinales tales como la jalapa, la polígala, el acónito, la ipecacuana, etc.-, los tallos y las cortezas -entre ellas las quinas y la canela-, luego las hojas -té, boldo y eucalipto-, frutos y semillas –pimienta, café, nuez moscada-, para finalizar con algunas glándulas y almidones. El paralelismo entre el contenido iconográfico del “Tratado de Materia Farmacéutica Vegetal”, elaborado por Gómez Pamo para ser utilizado como manual de esta disciplina, y las láminas de esta colección es evidente.
Imagen de tres tipos celulares en la lámina I de la colección "Gómez Pamo" (izquierda) representación de esta misma imagen (derecha) en la página 91 del Tratado (Madrid, 1906, 2ª Ed)
Lámina de la colección en la que se muestra la estructura de la raíz de Angelica (derecha) y un grabado (izquierda) publicado en las página 278 del Tratado (Madrid, 1906, 2ª Ed.)
Los dibujos realizados en los últimos años en que el Profesor Gómez Pamo ocupara la cátedra de Materia médica vegetal resumen su actividad docente; son testigo, además, de una actitud novedosa que pretendía analizar las estructuras histológicas de los vegetales para correlacionarlos de manera directa con la especie vegetal a la que pertenece, de esta forma se dotaba al farmacéutico de elementos de juicio para identificar las drogas vegetales y discernir las posibles falsificaciones de los productos medicinales sujetos a comercio.
Lámina de raíz de Convolvulus en la colección Gómez Pamo