La conciencia deshumanizada.

Tras su prolífica trayectoria, como profesor titular de la Universidad Complutense de Madrid durante 39 años y también al margen de esta institución, Juan Ignacio Hernáiz Blázquez publica su vigésimo libro. En esta ocasión, propone un documentado recorrido por las principales transformaciones que ha ido experimentando la conciencia a lo largo de la historia hasta llegar a la deshumanización de la conciencia, como rasgo propio de la actualidad. Uno de los grandes problemas que padece el hombre de nuestro tiempo es el de la enajenación. La conciencia deshumanizada o mediática no es otra cosa que la alineación según la filosofía hegeliana y, como dice su autor en el Prefacio (p.19), este tipo de conciencia “es el producto psicológico y sociológico de los medios de comunicación de masas”.

A través de las pantallas, los seres humanos perdemos la identidad y la perspectiva histórica. El consumismo que se promueve en los medios impide el desarrollo de la sensibilidad hacia la cultura, las artes o las ciencias. Actualmente, nos limitamos a repetir como papagayos lo que la agenda setting propone como temas de debate social. Es como si hubiésemos relegado el papel del cerebro al dedo, al cual le otorgamos la potestad para decidir el canal o el marco virtual en el que quedarnos. En el escenario que los medios de comunicación masivos proponen se cuestiona la libertad de expresión y, por ende, los derechos humanos en general. Aquello que denominamos como “políticamente correcto” es lo que determina nuestras discusiones y argumentos, incluso en contra de nuestra voluntad real o capacidad de decisión. Nos falta autoconciencia; a cambio obtenemos la mentira, la farsa; una conciencia alienada, deshumanizada.

Este libro plantea la visión del ser humano basada en la evolución de la conciencia, en la capacidad de cambio y adaptación que posee el espíritu de la persona. Sin ánimo de pretender ser un tratado de filosofía, toma como referencia teorías de algunos de los pensadores más influyentes a lo largo de la historia de la humanidad como G.W.F. Hegel, I. Kant, Platón y Aristóteles, además de esos 4 capítulos están los de la ética científica, la utopía social y el estado universal. Estas interesantes reflexiones no están exentas de profundidad en esta obra y requieren un esfuerzo de abstracción y, tal vez, un cierto conocimiento de trabajos anteriores del autor, para entender mejor el marco global en el que se mueve. Se trata de una lectura agradable, aunque densa, debido a las numerosas aportaciones y continuas referencias a otros textos –propios y ajenos- relacionados con otras áreas ampliamente dominadas por Juan Ignacio Hernáiz como el cine, la historia o el arte que enriquecen esta obra, pese a otorgar un carácter poco ligero a algunas de sus páginas.