"Avanzamos hacía una medicina de precisión en Alergología, una medicina predictiva, preventiva, personalizada, individualizada y participativa"

Hoy se acerca a nuestra Fundación un médico y académico, profesor e investigador científico, uno de los alergólogos más destacados de nuestro país, el Dr. Tomás Chivato que lleva años trabajando en el campo de la inmunoterapia específica de las enfermedades alérgicas y tratando de conseguir mejorarla calidad de vida de los pacientes alérgicos. A través de esta entrevista queremos conocer al médico y académico pero también al ser humano que, además de dedicar su trabajo a mejorar las condiciones de vida de sus pacientes también se debe a los suyos, a su familia y amigos.

Nos sentimos especialmente orgullosos porque la Fundación para el Conocimiento madri+d es la primera institución que realiza una entrevista al primer "alergólogo académico" de la Real Academia Nacional de Medicina de España.

¿Dr. Chivato, cómo nació su vocación médico-científica y luego académica?

Mi vocación científica nació durante los estudios de la carrera de Medicina pues tuve la fortuna de estudiar en el Hospital Universitario del Aire, adscrito a la Universidad Complutense de Madrid, donde el ambiente por la investigación era algo inherente a la actividad diaria. No solamente se trataba de forma excelente a los pacientes, sino que había una cultura de investigación impresionante. Los profesionales del hospital estaban muy comprometidos con su trabajo. Me gustaría resaltar la figura del profesor Javier Gómez de Terreros que consiguió que prácticamente el 90% de los médicos que trabajaban allí realizasen sus tesis doctorales. Por tanto, desde los años de la Universidad tengo esta inquietud por generar conocimiento.

Mis padres fueron fundamentales. Mi padre trabajó en un laboratorio farmacéutico y esto también influyó para cursar los estudios de Medicina. Además, durante mi infancia y juventud padecí neumonías de repetición y fui intervenido quirúrgicamente de un pulmón y estuve varias veces ingresado en el Hospital Gregorio Marañón. En el Hospital me trataron grandes figuras de la medicina española, los Profesores D. Ángel Ortega Núñez y D. Emilio Folqué. Durante varias semanas estuve ingresado y todos los profesionales me ayudaron a superar esos procesos. Cuando se tienen drenajes torácicos, se precisa oxígeno y se tienen 15 años, que venga alguien a ayudarte y animarte, te hace valorar y pensar "que bonita profesión la de ser médico".

La vida da muchas vueltas, y allí realicé la especialidad de Alergología años más tarde precisamente con una médico, la Dra. María Rubio Sotes, que entonces pertenecía al Servicio de D. Ángel Ortega.

¿Qué le llevó a dedicarse a esta disciplina tan nueva en esos momentos?

En los años 80 cuando acabé la carrera de medicina había que optar por una especialidad. La alergología, que forma parte de la inmunología, era una asignatura que no tratamos mucho durante la carrera pero sin embargo afecta a un número muy importante de personas. Tuve esa "llamada", en ese momento pude haber optado por otra especialidad médica. Hay que distinguir aquí entre especialidades médicas y quirúrgicas, yo me decanté por una especialidad médica y dentro de estas me decidí por la Alergología. Luego, tuve la gran fortuna de poder realizar la especialidad en el Hospital Gregorio Marañón con la profesora María Rubio Sotés y desde entonces y hasta ahora, llevo ya más de 30 años como alergólogo.

En mi recorrido desde los años universitarios he tenido cuatro maestros, Javier Pérez Piqueras en el Hospital del Aire, que fue presidente de la Asociación Española del Aparato Digestivo. Yo fui alumno interno durante la carrera en Digestivo y trabajé con todo el equipo. Fue allí donde vi que se podía compatibilizar la asistencia de calidad, con investigación, con docencia.

Otro de mis grandes maestros, en este caso maestra, fue la Dra. María Rubio Sotés, jefa del Servicio de Alergología del Hospital Gregorio Marañón que fue también presidenta de la Sociedad Española de la Alergología e Inmunología Clínica.

Ya siendo especialista, en el día a día del Servicio de Inmunología y Alergia del Hospital del Aire tuve otro gran maestro, el Prof. Rafael Laguna que fue un jefe generoso que me permitió poder realizar mi estancia postdoctoral en Uppsala y apoyó siempre todas mis iniciativas.

Y por último, El Profesor Javier Gómez de Terreros, que como he comentado fue y continúa todavía hoy día impulsando proyectos de investigación y animando a realizar tesis doctorales.

Lo que soy es en gran medida el fruto de estos maestros. Los maestros son muy importantes para la vocación docente e investigadora.

Quisiera resaltar también la importancia de las instituciones de las que he tenido la fortuna de ser miembro. Como médico militar he estado destinado en servicios de Alergia los Hospitales del Aire y posteriormente del Hospital Gómez Ulla. Todos mis superiores me han apoyado en todo momento. Destacaría a los Generales médicos D. Arturo Ortiz y D. Santiago Coca. Además de mis compañeros médicos, el personal de enfermería, los técnicos de laboratorio y el personal de administración también han colaborado en mi trayectoria.

En la actualidad tengo el honor de ser decano de la Facultad de Medicina de la Universidad CEU San Pablo de Madrid. En un primer momento el Rector D. Juan Carlos Domínguez Nafría y posteriormente el Rector D. Antonio Calvo Bernardino han confiado en mí y reconozco que es un privilegio poder compaginar docencia e investigación con la gestión universitaria.

¿Por qué cree usted que cada vez están aumentando las enfermedades alérgicas?

Son muchos los factores que influyen en ese aumento. Desde luego la genética influye, predispone a que se desarrolle una enfermedad alérgica pero, ciertamente, lo que está haciendo que esto sea una auténtica epidemia no infecciosa es el modo de vida que llevamos, el modo de vida occidental. El sedentarismo, que conlleva la falta de ejercicio, los hábitos tóxicos, como es el tabaco para las enfermedades respiratorias. Los excesos en la higiene, bañar mucho a los niños pequeños, utilizamos muchos jabones, les ponemos demasiados perfumes. No es necesario el uso de tanto producto químico. Pero desde luego, el factor que más influye en el aumento de las enfermedades es la contaminación ambiental. Estamos muy preocupados por cómo se está comportando occidente en el tratamiento de este tema, no se trata solo de la contaminación, es el cambio climático y el efecto invernadero. Todo esto está produciendo una situación que favorece el desarrollo de enfermedades alérgicas respiratorias. En la actualidad hay más de 150 millones de alérgicos en Europa.

¿No considera que ese aumento se debe también a que, como está pasando con el cáncer, se están diagnosticando mejor las enfermedades alérgicas? Cada vez hay más detección precoz. Debemos poner en valor el trabajo que hacen los alergólogos.

Efectivamente avanzamos hacía una medicina de precisión en Alergología, una medicina predictiva, preventiva, personalizada y participativa. La metodología diagnóstica incluye en la actualidad técnicas muy precisas como el diagnóstico molecular. En el tratamiento llevamos muchos años utilizando un tratamiento personalizado con la inmunoterapia específica. Además disponemos de potentes anticuerpos monoclonales, como la anti IgE, que nos está permitiendo controlar casos de asma grave mal controlado o urticarias crónicas refractarias a tratamientos habituales.

Afortunadamente disponemos de excelentes servicios de Alergología en la sanidad madrileña, tanto pública como privada. Nuevamente tengo la fortuna de contar con unos excelentes compañeros en los servicios de Alergia de todos los hospitales del Grupo HM de la Comunidad de Madrid. En la Universidad además disponemos de dos centros excelentes de investigación. El Instituto de Medicina Molecular Aplicada (IMMA) dirigido por el Profesor Domingo Barber y el Centro de Metabolómica y Bioanálisis (CEMBIO) dirigido por la Profesora Coral Barbas que son auténticas "factorías" de investigación.

Nuestros alumnos de la Facultad reciben formación en los Hospitales del Grupo HM en los cursos clínicos. En los centros integrales de Cardiología (CIEC), Neurociencias (CINAC) y Oncológico (CIOCC) de HM se realiza asistencia, docencia e investigación de excelencia.

¿Cómo afectan las enfermedades alérgicas a la calidad de vida de los pacientes? ¿Qué pasos se están dando para conseguir mejorarla?

Las enfermedades alérgicas afectan en gran medida a la calidad de vida de los pacientes. Tenemos estudios que conocemos como "Alergológica" de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) llevados a cabo durante los años 1992, 2005 y 2015 que demuestran cómo han ido evolucionando las enfermedades alérgicas y comprobamos como afectan en la calidad de vida, porque un niño con alergia no hace el mismo deporte que un niño sin ella o un joven universitario alérgico que está haciendo sus exámenes finales desde luego no rinde lo mismo que un joven sin alergia. Un adulto alérgico que está trabajando no tiene la misma productividad. Todo esto, además tiene una serie de costes, unos costes directos y otros indirectos que se han obtenido del estudio de farmacoeconomía de la rinitis alérgica (FERIN) de la SEAIC.

Por eso es muy importante todo lo que se está desarrollando en investigación, en educación, en prevención en Alergología.

Quisiera destacar El libro de las enfermedades alérgicas (descargable en www.seaic.org), la página de información de niveles de pólenes (www.polenes.com) o de alergia a himenópteros (www.alergiaabejasyavispas.com) como algunas de las herramientas útiles para pacientes alérgicos y sus familiares.

Son también muy útiles la guía española de manejo del asma (GEMA) para pacientes o la guía de diagnóstico y tratamiento de la anafilaxia (GALAXIA) para pacientes, descargables ambas en la página de la SEAIC www.seaic.org.

Las asociaciones de pacientes juegan un papel cada vez más relevante.

Prof. Chivato, nos gustaría que dejara claro si el gluten es una alergia o una intolerancia, para que el rigor de la ciencia supere tantas controversias del Dr. Google.

La celiaquía es una enfermedad debida una intolerancia a la gliadina que es una proteína del gluten. Hay que diferenciar lo que son las alergias alimentarias y lo que son intolerancias.

La alergia alimentaria, se debe a la producción de un anticuerpo tipo IgE específico, es una reacción de hipersensibilidad tipo I que puede producir varias manifestaciones: digestivas, respiratorias, cutáneas, llegando a producir en algunos casos anafilaxia e incluso la muerte del paciente.

Las intolerancias alimentarias se deben al déficit de las enzimas que metabolizan determinados principios activos. Por ejemplo si no existe lactasa no se metaboliza la lactosa y se produce por tanto una intolerancia. Otro ejemplo sería la intolerancia a la fructosa si no existe la enzima que la metaboliza.

¿Cree importante la divulgación de su trabajo para que la sociedad entienda la importancia de las medidas preventivas y evitar, en lo posible futuras alergias?

Sin duda, la educación es fundamental. Ya no se trata solo de diagnosticar y tratar, sino de educar y prevenir y aquí las familias tienen un papel fundamental y además, esta es una "medicina" muy barata. Por ejemplo lo que sigue siendo inaceptable es la alta tasa de tabaquismo que tenemos en este país. Hablando de factores predisponentes, hay que decir que los hijos de padres fumadores desarrollan más fácilmente alergias respiratorias. Esto es un mensaje que hay que transmitir a la opinión pública. Es malo fumar, es malo fumar para nuestros hijos. No se debe fumar en los domicilios familiares. Algo está fallando en los mensajes de lo perjudicial que es el tabaco. Por otro lado, está el papel de las autoridades en lo que respecta a la contaminación en las ciudades, habría que evitar los motores diésel o los coches antiguos y potenciar el transporte público.

Además de ejercer la medicina, como especialista alergólogo a "pie de obra", es Decano de la Facultad de Medicina de la Universidad San Pablo-CEU. La enseñanza, el aprendizaje, el conocimiento, la gestión y la práctica clínica. ¿Cómo compatibiliza ambas actividades?

En el campo de las ciencias de la salud, no vale la teoría por si sola. Esto se demuestra poniendo el conocimiento al servicio de la práctica. Cuando uno ve pacientes es más fácil trasmitir esa pasión por ayudar al prójimo que está sufriendo, entonces hay que compaginar. Tenemos aquí al Dr. Sánchez Martos, un experto en humanizar la asistencia con la ciencia. En alergología tenemos ahora unos métodos de diagnóstico molecular de una enorme exactitud, pero eso hay que combinarlo con la transmisión de todos esos datos al paciente para que lo entienda, para que lo pueda aplicar en su día a día.

En este sentido, la educación sanitaria también es fundamental, Hay que enseñar cómo funciona un dispositivo para tratar el asma bronquial. A veces, prescribimos fármacos muy caros y no explicamos adecuadamente cómo se utilizan, de esa forma estamos perdiendo eficacia en el tratamiento ante los pacientes. Por eso no podemos separar asistencia de docencia con el alumno, con el residente, con el paciente, con sus familiares en el caso de los niños, porque ahí tenemos una gran responsabilidad y si además, somos capaces de buscar una parcela en el día para investigar, intentar comprender causas o mejorar diagnósticos o realizar mejores tratamientos, pues mucho mejor.

Nos gustaría poner en valor su valentía, ¿podemos utilizar el titular "El Dr. Tomás Chivato apoya la hipótesis de que a veces incluso los tratamientos más caros no mejoran la calidad de vida de los pacientes porque no sabemos explicarle al paciente cómo utilizarlo"?

Sin duda, cada vez tenemos más jóvenes con más capacidades en las aulas de las facultades de Medicina pero también es cierto que, debido a las nuevas tecnologías, la faceta de la comunicación no es la mejor. Por eso se están incluyendo en los planes de estudios, asignaturas como habilidades en comunicación. Ya nadie se mira a los ojos, vamos todos muy deprisa y además hay que introducir los datos en un ordenador, todo esto requiere un cambio de paradigma en los futuros profesionales de ciencias de la salud. Tenemos que buscar más tiempo para estar con los pacientes, no se trata solo de prescribir el último fármaco, sino de explicar el cumplimiento de un fármaco sencillo. Para esto podemos contar con excelentes profesionales de enfermería que colaboran en el día a día en los servicios de Alergia.

Hace unos años hicieron unos cursos para pacientes asmáticos en la Consejería de Salud de la Comunidad de Madrid y fueron un éxito y esto es así porque, cuando a un joven le enseñas a utilizar bien su tratamiento deja de ir a urgencias y deja de estar ingresado. Si encima lo traducimos en euros, es muchísimo lo que se le ahorra al sistema. Es muy barato y más saludable invertir en educación y prevención, sin olvidar el diagnóstico y el tratamiento

¿Qué opinión le merecen los estudios universitarios de medicina en España ? ¿Considera que estamos en línea con el resto de los países de nuestro entorno?

Podemos estar muy orgullosos. Tenemos la suerte de estar en Europa, en España y en Madrid. Tenemos unas muy buenas facultades de medicina en toda España y unas muy buenas facultades en la Comunidad de Madrid. La formación de nuestros futuros médicos es excelente. Si es cierto que ha habido que cambiar algunos aspectos de esa formación, ya no se trata únicamente de trasmitir conocimientos sino que ahora son necesarias otras habilidades. Tienen que mejorar en técnicas de comunicación, tienen también que aprender a investigar. Un alumno de medicina, igual que todos los graduados, tiene que hacer un trabajo de fin de grado que es un trabajo de investigación. Tienen que aprender a generar conocimiento; un médico, aparte de su faceta humana, tiene que ser un científico para poder mejorar diagnósticos, tratamientos y por ende, la calidad de vida de los pacientes.

Personalmente, ahora, al ser Decano de la Facultad de Medicina de la Universidad San Pablo-CEU tengo que decir que me siento muy orgulloso de los alumnos, no solo de los de Medicina sino también de los de Enfermería, Psicología, Fisioterapia, Odontología y desde este curso también de Genética.

Además de los grados tenemos una formación en masters, una escuela de doctorado internacional, la CEINDO que da cobertura a las tres universidades CEU donde hay un programa de medicina traslacional. Sin olvidar los cursos on line y el e-learning donde hemos empezado el año pasado con cursos a distancia de asma grave o de enfermedades inmunomediadas, entre otras.

También colaboramos con la Sanidad Militar y se está realizando alguna tesis doctoral en Telemedicina de gran importancia en la actualidad para la alergología para mejorar la salud en zonas lejanas de las grandes áreas urbanas.

Dr. Chivato, le acaban de nombrar Académico Correspondiente de la Real Academia Nacional de Medicina de España, mañana día 6 le entregan la medalla y su título. ¿Qué significado tiene para usted recibir este honor?

Llevo más de 30 años de trabajo como alergólogo y la verdad es que nunca pensé que esto iba a ocurrir. Pero sí, es cierto que siento mucho orgullo y también es un orgullo para la SEAIC porque, hasta donde yo recuerdo nunca ha habido un alergólogo en la Academia. Es importante que en un foro científico de tal nivel, con tanto rigor y una historia impresionante, se vaya a hablar de alergología porque pensamos que la Alergología debe estar al mismo nivel que otras especialidades. Quiero agradecer personalmente a la Real Academia Nacional de Medicina de España y a su presidente, el Profesor D. Joaquín Poch, que tuviese esta iniciativa con especialidades no presentes, para que estemos representados en la Academia. Porque la Alergología española, ahora mismo, está liderando la Alergología mundial a nivel de investigación. Los proyectos que se están desarrollando en hospitales de la Comunidad de Madrid, así como en otros hospitales de otras comunidades autónomas, son impresionantes. Por citar algunos avances destacaría los protocolos de desensibilización a alimentos o fármacos, o los avances en pautas agrupadas de inmunoterapia.

¿Qué papel cree usted que tienen las Academias de Medicina en nuestra sociedad actual?

Las Academias de Medicina tienen un papel muy importante. La Real Academia Nacional de Medicina de España (RAMNE) se está modernizando y adaptándose a los nuevos tiempos, tiene su propio canal de TV, su página web y tienen sus propios diccionarios para velar por la pureza de los términos. Diccionarios que hay que compartir con todos los países de habla hispana, como el Diccionario de Términos Panhispánico. Esto es transcendental, ahora mismo, el español es el segundo idioma a nivel mundial. En un país como EE.UU., está adquiriendo mucha importancia a una velocidad tremenda. Cada vez hay más jóvenes estadounidenses que vienen a nuestra universidad a aprender español, futuros médicos en Estados Unidos, porque el español está imponiéndose cada vez con más fuerza y el tema de la terminología es fundamental. En segundo lugar, está la colaboración con otras academias. Hay una relación muy intensa con todas las academias, sobre todo de Latinoamérica. Hay una cordial relación en la transmisión de conocimiento. La RANME realiza una serie de publicaciones divulgativas y científicas periódicas entre la que destacan los Anales. Realiza exposiciones temporales y el calendario de sesiones ordinarias y extraordinarias es muy completo y atractivo

Por otra parte, la Academia es un lugar donde se reflexiona. A veces vamos demasiado deprisa en esta ciudad en la que nos ha tocado vivir, y en la Academia se vive a otro ritmo, allí es posible reflexionar y pensar estrategias siempre desde el punto de vista científico. La Real Academia Nacional de Medicina de España es una academia científica, es una academia de medicina donde tienen visibilidad todas las áreas de conocimiento relacionadas con la medicina. Al final eso repercute en la colaboración con universidades y sociedades científicas, para mejorar y avanzar en el conocimiento. Todo ello, al final, se traslada a los pacientes. De nada sirve tener unos libros muy bonitos o vídeos maravillosos si eso no llega a la sociedad. Yo creo que las academias tienen una gran responsabilidad para aumentar el conocimiento, transmitirlo y poder aplicarlo como se hace en las universidades.

Con su permiso Dr. Chivato, pasamos al terreno personal y humano... y lo hacemos con nuestro estilo de "preguntas y respuestas breves". Detrás del médico, del profesor, del científico, del académico hay un hombre con su familia, sus seres queridos, ¿se siente apoyado por los suyos en su trabajo?

Sí, me siento muy apoyado por mi familia. Ellos siempre me han comprendido y creo que se sienten orgullosos. Tengo cuatro hijos. El mayor tiene 31 años, es farmacéutico especialista en Radiofarmacia y vive en Murcia. Tengo además tres hijas fantásticas, la mayor es farmacéutica y graduada en nutrición, la tercera este año acaba la carrera de medicina y la pequeña de 18 años, está estudiando farmacia y biotecnología en inglés.

Quien tiene el mérito de llevar la familia por el buen camino es mi mujer, Ángeles que es bióloga y trabaja en la Oficina Española de Patentes y Marcas. Es el auténtico motor de la familia.

Su entrega y trabajo diario con sus pacientes y alumnos seguro que le han supuesto renuncias personales (tiempo de estar con los suyos, vacaciones...)

Sí, he sacrificado mucho tiempo de estar con mis hijos. Aunque no he faltado en los momentos importantes de sus vidas y todo el tiempo libre que podemos lo hemos compartido.

¿Le importa compartir con nosotros algún simpático mote, de joven o actual?

Sí, en el colegio me llamaban "paella" porqué tenía mucho acné y también me llamaban "Braulio", rememorando el protagonista de la serie televisiva de "Crónicas de un pueblo". Jugaba mucho a "churro, media manga, manga entera" y como era de los más brutos, me llamaban Braulio. Y en el hospital era conocido como el Dr. "Acusica", seguro que por mi apellido.

¿Cine o teatro?

Cine, la última película que he visto ha sido El Gran Showman, con Hugh Jackman como protagonista.

¿Y libro?, ¿le gusta leer?

Procuro leer libros, no muy extensos porque no tengo mucho tiempo. Acabo de terminar uno muy recomendable de Julián Marías: Breve tratado de la ilusión.

Por cierto, ¿Ha perdido alguna vez la ilusión en su vida?

Reconozco que no.

¿Práctica algún deporte?

Cuando era joven jugaba al fútbol, ahora me gusta correr todos los fines de semana y en ocasiones juego al tenis con mis hijos.

¿Música?

La verdad es que solo escucho música en el coche, la radio; música de fondo, aunque nunca me olvido de Cat Stevens.

¿Ha llorado alguna vez a lo largo de tu ejercicio profesional por el fallecimiento de un paciente o cuando ha tenido que dar un diagnóstico con mal pronóstico?

Sí, he llorado y en varias ocasiones.

Para terminar, debemos recordar a nuestros seguidores que el Dr. Tomás Chivato, además de académico acaba de ser galardonado con otro nombramiento muy importante para España, para Madrid y para todos los colegas alergólogos.

Recientemente, en un proceso de selección que se ha llevado a cabo, la Academia Europea de Alergia e Inmunología Clínica ha tenido a bien nombrarme el primer Science Committee Chair, con unas responsabilidades importantes a la hora de coordinar la investigación en la Academia Europea. Esta Academia publica tres revistas científicas, tiene diferentes grupos de interés y secciones y trabaja muy estrechamente con el Comité Ejecutivo de la Academia Europea del que he sido parte hasta hace poco y de lo que me siento también muy orgulloso.

Felicitaciones Dr. Chivato, nuestro primer alergólogo académico. Estamos todos de enhorabuena y mañana nuestra Fundación estará a su lado en la Real Academia de Medicina.