Entrevista a Joaquín López, promotor de X COV proyecto seleccionado en el Hackatón ‘Vence al virus’ de la Comunidad de Madrid y ganador absoluto del ‘Code the curve’ organizado por la UNESCO
¿Cómo surge este proyecto?
La idea surgió a raíz del confinamiento. Somos un grupo de personas que trabajamos en distintos proyectos de imagen médica, colaborando con empresas y hospitales en distintos proyectos, españoles e internacionales, y con este conocimiento y esta experiencia queríamos colaborar en la situación de emergencia derivada de la crisis sanitaria por COVID-19. Así que nos pusimos a hablar con los médicos para saber qué tipo de imágenes recogían y descubrimos que en nuestro país la gran mayoría de imágenes eran radiografías y que eran muchísimas, por lo que herramientas que les pudieran ayudar en su análisis eran bienvenidas. Empezamos a pensar de qué manera les podíamos ayudar cuando salió el Hackaton de la Comunidad de Madrid ‘Vence al Virus’ y decidimos presentarnos un grupo de profesionales y de estudiantes muy motivados para trabajar con un objetivo claro: ayudar a los radiólogos con el análisis de las radiografías de los pacientes de COVID 19 para facilitar su diagnóstico y también hacer un mejor seguimiento de la evolución de los pacientes durante su hospitalización. Empezamos en ese momento a darle forma y conseguimos en un fin de semana crear un prototipo que ya pudimos empezar a enseñar a la semana siguiente.
¿En qué consiste exactamente? ¿Cómo funciona y donde radica su importancia o novedad?
El objetivo de la herramienta es ayudar a los radiólogos en su análisis de las radiografías. La cantidad de radiografías que se han hecho hasta la fecha a nivel mundial supera los cientos de miles, porque en muchos casos las radiografías sirven tanto para decidir si a un determinado paciente que llega a un hospital se le ingresa, como para valorar su estado si se le quiere dar el alta temprana, que en un momento dado de la pandemia era un tema fundamental para poder liberar camas en hospitales, y por supuesto para valorar la evolución del paciente y si está respondiendo o no a los tratamientos.
Durante su hospitalización, a un paciente se le hacen radiografías cada 3-4 días y sirve un poco de guía para ver su evolución, por lo que una herramienta que pudiera analizar todo ese volumen de radiografías y ayudara al radiólogo en la toma de decisiones nos parecía fundamental.
El objetivo es ayudar a los radiólogos con el análisis de las radiografías de los pacientes de COVID 19 para facilitar su diagnóstico y hacer un mejor seguimiento de la evolución de los pacientes durante su hospitalización
¿Y cómo puede ayudar a los profesionales a tomar decisiones? Pues facilitándole los casos que se vean más claros que son de pacientes sanos, o indicándole en qué regiones puede haber afectación o si se dan un conjunto de imágenes dinámicas poder dar la información de cuál está siendo la evolución del paciente de manera automática.
Todas estas herramientas hay muchos radiólogos que las consideran útiles y su utilidad también radica en que permite ver y aprender de otros casos alrededor de todo el mundo, porque hay hospitales en los que tienen muy pocos casos y si los radiólogos disponen de una herramienta que ha sido entrenada con miles de casos puede ayudarles a estar más seguros de sus decisiones.
Colaboramos con el Hospital Clínico San Carlos de la Comunidad de Madrid que ha creado una base de datos muy grande de pacientes, con HM Hospitales que está creando otra base, en Valencia también están creando bases de datos que se van haciendo públicas… Se establecen colaboraciones muy fuertes entre distintas instituciones porque es una lucha común y es una oportunidad muy buena para desarrollar herramientas que estén validadas por distintos grupos en distintos países.
En estos momentos estamosmejorando la herramienta on-line para incorporar muchos más casos y que la herramienta sea mucho más robusta, porque uno de los principales problemas es que sirva en distintos hospitales de diferentes lugares del mundo. Esto supone un reto en sí mismo porque también la equipación varía mucho no ya entre regiones sino entre hospitales de una misma región. Hemos recibido peticiones desde Etiopía, Brasil… por lo que estamos haciendo ahora mismo una validación para comprobar hasta qué punto puede servir en distintos centros.
La herramienta web está muy bien pero también ha habido un movimiento por los hospitales diciendo que a ellos lo que les interesaría sería tenerla incorporada dentro de sus propios centros. Así que ahora mismo estamos avanzado en dos líneas: la parte abierta con la página web y una versión que sería instalable dentro de los servicios de los hospitales, que no sé ahora mismo si esa parte tendrá finalmente una rama comercial, porque realmente no es la motivación del proyecto, pero sí puede beneficiarse de tener un uso más fácil porque al radiólogo lo que le resulta útil es tenerlo incorporado dada la carga de trabajo que tienen y facilitar también que tenga todo el marcado europeo o de Estados Unidos que es algo que nos preocupa enormemente: Que en todo lo que se haga en la página web quede claro que es a nivel de investigación, formación y educación y que no se puede utilizar directamente para dar un diagnóstico al no estar aprobado por las autoridades sanitarias.
¿Por qué decidisteis participar en el Hackaton ‘Vence al virus’ de la Comunidad de Madrid el pasado mes de abril? Háblanos un poco de vuestra experiencia.
En nuestro caso es que encajó muy bien en los tiempos y nos vino perfecto el tener una idea más o menos definida de lo que queríamos hacer pero sin haberla formalizado.
Nos vino muy bien todo ese tiempo previo de hablar con los usuarios finales que son los radiólogos para tener claro qué es lo que demandaban y dedicarnos durante el Hackaton a la implementación de la página web, los modelos, etc.
La motivación estaba muy clara, todo el mundo quería apoyar de alguna manera, de hecho recibimos peticiones de gente que quería colaborar que finalmente tuvimos que desestimar, pero hemos llegado en algún momento a ser 15 personas conectadas trabajando.
Nunca pensamos en ganar aunque obviamente uno siempre quiere hacer un buen papel, pero nuestro objetivo era aprovechar el impulso que nos brindaba el hackaton para desarrollar la herramienta y crear un prototipo que pudiésemos enseñar. Por lo que acabar siendo uno de los proyectos seleccionados ha sido una sorpresa muy grata y a raíz de eso se han producido importantes avances en el proyecto. Osea, verdaderamente, ‘Vence al virus’ fue un impulso, un trampolín para nosotros.
Sin embargo no es la única iniciativa de estas características en la que habéis tomado parte: Fuiste los ganadores absolutos del evento mundial «Code the curve» organizado por la UNESCO, IBM y SAP, y habéis obtenido premios en metálico de Google y Amazon. ¿Qué supone para vosotros el respaldo de estos gigantes a nivel mundial?
Realmente lo que demuestra es que habíamos identificado muy bien la necesidad.
A raíz del hackaton de la Comunidad de Madrid se pusieron en contacto con nosotros desde Repsol Brasil para ofrecernos apoyo de un cluster de ordenadores que tienen allí para poder usarlo.
Poco después salió un segundo hackaton, este a nivel mundial, de la UNESCO y nos presentamos y acabamos ganando esa competición.
El Hackaton ‘Vence al virus’ de la Comunidad de Madrid ha sido un verdadero trampolín para nosotros, a raíz del cual se han producido importantes avances en el proyecto
Y recientemente Google y Amazon nos han ofrecido sus servicios en la nube para todo el tema de entrenamiento y formación.
Realmente estamos un poco sobrepasados por el apoyo recibido, pero enormemente orgullosos y satisfechos de haber conseguido con distintos recursos de distintas iniciativas poder ir desarrollando el proyecto de manera natural, cosa que de otra manera hubiese sido más difícil.
En este punto, me gustaría agradecer públicamente el gran apoyo que hemos ido recibiendo de instituciones, de la Consejería de Ciencia, Universidades e Innovación de la Comunidad de Madrid, que, ya digo, sin ese impulso que nos dio en ese momento clave posiblemente esto se hubiese quedado más en un intento de proyecto o en algo mucho menos de impacto. El tener esto nos dio el trampolín perfecto para presentarnos con garantías al Hackaton de la UNESCO. A raíz del hackaton de la Comunidad de Madrid han llegado el resto de iniciativas y apoyo de distintas instituciones para seguir desarrollándolo y ahora podemos decir que ya tenemos todos los recursos necesarios para avanzar.
¿En qué punto se encuentra actualmente el proyecto y cuáles son sus próximos pasos?
El problema inicial era conseguir suficientes datos con los que nutrir nuestra herramienta. Al principio era difícil conseguir esos casos. Los que había eran publicaciones de casos muy claros o muy extremos y necesitábamos más casos generales, de pacientes en distintos equipos y distintos hospitales y esa es la parte en la que más hemos logrado avanzar: Disponer de muchos más casos, de modo que los modelos sean mucho más robustos y se puedan aplicar de manera mucho más fiable.
En la actualidad estamos en la fase de creación del modelo pensando en su instalación en hospitales con la idea de pasar inmediatamente después a la fase de certificación.
Vamos a hacer un programa piloto en el Hospital Clínico de Madrid en el que podamos ver su uso y conseguir la validación de cara a estar preparados y con las herramientas necesarias en caso de un posible rebrote durante el otoño-invierno.
¿De qué manera os está ayudando la Fundación para el Conocimiento madri+d?
Para nosotros participar en el Hackaton ya era una oportunidad en sí misma porque nos dio el impulso y el enfoque que necesitábamos, pero a raíz de ser finalistas hemos conseguido un apoyo muy bueno tanto a nivel de apoyo jurídico que es algo que normalmente no se conoce tan bien, sobre todo desde el punto de vista de universidad o de desarrollo más básico, sobre creación de empresas, así como contactos y formación en diversos aspectos que nos está viniendo muy bien, porque hay un abanico muy grande de posibilidades y hemos podido ir viendo cuáles nos eran más necesarios para completar nuestra formación. Este es uno de los grandes beneficios que hemos obtenido de haber participado en el Hackaton.
La Fundación madri+d nos ha beneficiado mucho ya que a los finalistas del hackaton les ha ofrecido la posibilidad de formarse en temas en los que normalmente no estamos tan acostumbrados como temas legales, de propiedad intelectual, formación de empresas y distintos temas de interés.
Ha sido una iniciativa muy buena que realmente no esperábamos porque nuestra motivación para participar en el Hackaton era principalmente era crear la herramienta, aprovechar la iniciativa para tener creado un prototipo que pudiésemos enseñar y todo esto han sido beneficios adicionales que nos hemos encontrado y que no están viniendo muy bien, porque tener apoyo institucional en forma de formación para cubrir las necesidades que nos faltan es algo muy bueno. También a la hora de establecer más contactos. Y además ha sido algo que se ha creado de manera muy flexible, cosa que agradecemos especialmente, osea que no nos han dado un curso ya establecido previamente en algo que a lo mejor no necesitas sino que se ha abierto a nuestras necesidades específicas, y todos los proyectos estamos especialmente contentos de esto.
Háblanos del equipo humano que está detrás del proyecto.
Inicialmente estábamos desde la Universidad Complutense de Madrid un pequeño grupo de estudiantes liderados por mí, y a raíz del hackaton de la Comunidad de Madrid se ha ido creando un grupo bastante amplio y diverso con miembros también de la Universidad Autónoma de Madrid.
Se ha incorporado por ejemplo una doctora en Bellas Artes que tras realizar el doctorado recibió una beca de formación de Samsung y ha ido incorporándose en el campo de la Inteligencia Artificial y nos está aportando visiones complementarias muy interesantes a las que a lo mejor tenemos los físicos. También tenemos el apoyo de radiólogos y médicos de medicina nuclear sin cuyas aportaciones no tendríamos tan claro las pegas o los beneficios de la herramienta.
¿Cuáles han sido las principales dificultades con las que os habéis encontrado en estos meses?
La principal dificultad ha sido la lucha contra el tiempo. En momentos de confinamiento el equipo ha trabajado mañana, tarde, noche y, muchas veces, fines de semana porque se trataba de desarrollar algo necesario en muy poco tiempo. Normalmente un proyecto de investigación de este tipo se desarrolla en un plazo de 2, 3 y hasta 4 años. Tener un prototipo, tener toda la información recogida y estar trabajando en tan poco tiempo es algo a lo que no estamos acostumbrados. Ha sido bastante intenso pero la necesidad estaba clara: Todo el desarrollo que hagamos debe ser muy corto y estar muy focalizado. Y yo creo que esa sido la principal dificultad porque el resto, en cuanto a apoyo de instituciones, implicación de los participantes, recogida de datos.. Todo han sido facilidades.
¿Y el mayor logro?
Yo diría que el poder trabajar de manera tan fluida y tan rápida porque ha sido fundamental: El tener clara una idea y avanzar hacia ella. Es decir, el principal logro ha sido ver que juntando todas las piezas y todos los conocimientos de cada uno podíamos formar un proyecto tan potente. Porque un proyecto de estas características no es solo crear la herramienta en sí, sino darla a conocer, hablar con gente para recoger información….Y hacer todo eso en tan poco tiempo creo que es nuestro principal logro.