Una operación policial en Brasil en 2013 rescató miles de fósiles que iban a ser contrabandeados. Entre ellos, el único ejemplar entero de una extraña especie de reptil.
Hasta entonces, los únicos fósiles que se conocían de Tupandactylus navigans, una especie de reptil volador que existió en el Cretácico, eran de cráneos. El fósil recuperado, además de poseer casi todos los huesos, mantenía incluso la integridad de algunos tejidos blandos de la cresta de la cabeza. Ahora, un estudio publicado en la revista PLoS ONE describe en detalle sus características.
La noticia se puede leer en medios internacionales como The New York Times o National Geographic, y nacionales como El País y Tele5.
Este hito científico habría sido imposible sin el éxito de la operación policial. El tráfico ilegal de fósiles es un problema importante en Brasil y otros lugares del Sur Global. A menudo, esos restos acaban en países más ricos, un ejemplo del llamado colonialismo científico.