Muchos machos de rana intentan aparearse con cosas absurdas, pero no está claro por qué lo hacen ni si es culpa de los humanos
Es un comportamiento extraño pero lo suficientemente común para que tenga un nombre: “amplexus mal direccionado”, siendo el amplexus el término que se usa para describir la posición de apareamiento de las ranas.
En este artículo en The Atlantic se explica el fenómeno y se especula con su función evolutiva. Es posible que la tendencia a copular ayude a los machos a aumentar la probabilidad de dejar descendencia, e incluso se han dado casos donde apareamientos aparentemente sin sentido han sido fructuosos.
Otra duda es si el impacto humano está haciendo esos comportamientos más habituales. La falta de lluvia causada por el cambio climático, la intensidad de los ruidos en las ciudades y la destrucción de espacios naturales podrían favorecer este tipo de conductas.