Las ciencias sociales nos ayudan a responder algunas de las preguntas más importantes de nuestras sociedades. Pero para poder beneficiarnos de ese conocimiento, necesitamos tratarlas mejor
“Nuestra impresión es que solo nos hacemos presentes para la sociedad cuando alguna urgencia desvela su necesidad: un problema social que no sabemos cómo enfrentar (maltrato entre iguales, violencia de género), una nueva realidad en torno a la cual hay que legislar (familias homoparentales, menores trans), una circunstancia nueva que puede estar afectando al bienestar individual o social (infancia y nuevas tecnologías, conciliación entre vida familiar y laboral).”
Esa es la queja que exponen dos investigadoras del departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación de la Universidad de Sevilla en este artículo publicado en La Marea. Piden a los gobiernos poder dedicar menos tiempo a la burocracia y más recursos estables.