La próxima ola de tecnología de inteligencia artificial amenaza con usar todavía más recursos energéticos
En los últimos tiempos, con la popularización de sistemas como ChatGPT y la popularización de las herramientas de inteligencia artificial, está aumentando la preocupación por los impactos ambientales de esta tecnología.
Esta semana, la investigadora Kate Crawford habla sobre el tema en este artículo en Nature. Crawford, que lleva años estudiando el tema, muestra su satisfacción por el hecho de que finalmente, se estén empezando a dar pasos para abordar este aspecto. Un proyecto de ley presentado en Estados Unidos a comienzos de este mes podría crear las bases para cuantificar y regular el uso energético de la inteligencia artificial.
La autora aboga por medidas que obliguen a las empresas a medir y reportar su consumo de agua, que está aumentando rápidamente debido a las mayores necesidades de computación de los servidores. También que se priorice el desarrollo de sistemas más eficientes energéticamente y que empleen energías renovables.