Un estudio analiza el papel de la autoorganización ciudadana en la respuesta a la crisis social producida por la pandemia
Despensas comunitarias, donaciones, ayudas a los mayores, etc… Si algo bueno ha dejado la pandemia ha sido un reguero de ejemplos del mejor lado del ser humano ante una situación de emergencia inédita y llena de incertidumbres.
Un estudio del Grupo Cooperativo Tangente, con la colaboración de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid, ha analizado cien experiencias de ese tipo. Entre las conclusiones que sacan es que la mayoría de ellas han funcionado sin subvenciones ni apoyo público y han estado lideradas principalmente por mujeres y personas jóvenes.