• Astrolabio

    Quiero decir
                        amar no es salir a la calle
                                            decir a los que pasan

  • Coplas del mismo hechas sobre un éxtasis de alta contemplación

          Entréme donde no supe,
    y quedéme no sabiendo,
    toda sciencia trascendiendo.
          Yo no supe dónde entraba,
    pero, cuando allí me vi,
    sin saber dónde me estaba,
    grandes cosas entendí;
    no diré lo que sentí,
    que me quedé no sabiendo,
    toda sciencia trascendiendo.
          De paz y de piedad
    era la sciencia perfecta,
    en profunda soledad,
    entendida vía recta;
    era cosa tan secreta,
    que me quedé balbuciendo,
    toda sciencia trascendiendo.

  • Teología científica

    Probablemente es uno de muchos.
    Estará cansado, a veces,
    distraído. Difícil trabajo,
    todas estas series de experimentos,
    más que incontables. Sí,
    en principio lo sabe todo,
    pero naturalmente no se puede
    preocupar de los detalles:
    reactores que se recalientan,
    nubes de plasma, campos relativistas.
    Finalmente no somos los únicos.

    Sólo después de una eternidad
    toma de nuevo la prueba en su mano.
    En su enorme ojo
    se refleja nuestro universo.
    Pero entonces ya hemos pasado.
    Lástima. A lo mejor le hemos
    interesado, desde el punto de vista

  • Oda al libro (II)

    Letras largas, severas,
    verticales,
    hechas
    de línea
    pura,
    erguidas
    como el mástil
    del navío
    en medio
    de la página
    llena
    de confusión y turbulencia,
    Bodonis
    algebraicos,
    letras
    cabales,
    finas
    como lebreles,
    sometidas
    al rectángulo blanco
    de la geometría,
    vocales
    elzeviras
    acuñadas
    en el menudo acero
    del taller junto al agua,
    en Flandes, en el norte
    acanalado,
    cifras
    del ancla,
    caracteres de Aldus,
    firmes como
    la estatura
    marina
    de Venecia
    en cuyas aguas madres,
    como vela

  • Al margen del buffonintendente del jardín del rey,jardín zoológico

    La nature est le systeme des lois.

    Rinoceronte, burdo error notorio,
    Caballo, felicísima belleza.
    ¿ Experimentos de laboratorio?
    Responsable, ninguno o la maleza,
    Confusión que elevada hasta su emporio
    Goza de majestad: Naturaleza.

    Es hipérbole torpe a la girafa.
    Mal se trazó el dibujo de ese cuello.
    En Roma habría disgustado a Rafa-
    el, che avrebbe composto il collo meglio.
    Un cisne, curvo cuello, nunca estafa
    Si no camina. Por un río es bello.

  • Balada parabólica

    EL destino, como un cohete, vuela parabólicamente,
    casi siempre atravesando las tinieblas y formando un arco iris.
    Hubo una vez un pintor rojo como el fuego, Gaugin,
    bohemio, y antes, en el pasado, agente de bolsa.
    ¡Para entrar principescamente al Louvre,

  • Líneas

    ¿Habéis visto el arado
    que en su camino engendra
    surcos línea tras línea
    hasta llenar la tierra?

    Y lo que admiro en esto
    no es la completa página
    y toda la insaciable
    actividad para llegar a ella

    sino cuando aquel surco
    más queda ya acabado
    y el tractor duda:
    otra línea para ser comenzada

    y luego arrastra y gira
    la reja a jorro y esa
    vuelve también al nuevo
    y creciente canal

    y cada reversión así
    al mitigar la agresión pura
    prepara para el concertado
    apresurado de la operación,

  • Oda al átomo

    Pequeñísima
    estrella,
    parecías
    para siempre
    enterrada
    en el metal: oculto,
    tú diabólico
    fuego.
    Un día
    golpearon
    en la puerta
    minúscula:
    era el hombre.
    Con una
    descarga
    te desencadenaron,
    viste el mundo,
    saliste
    por el día,
    recorriste
    ciudades,
    tu gran fulgor llegaba
    a iluminar las vidas,
    eras
    una fruta terrible,
    de eléctrica hermosura,
    venías
    a apresurar las llamas
    del estío,
    y entonces
    llegó
    armado
    con anteojos de tigre
    y armadura,
    con camisa cuadrada,
    sulfúricos bigotes,

  • Ciencia de amor

         No sé. Sólo me llega, en el venero
    de tus ojos, la lóbrega noticia
    de Dios: sólo en tus labios, la caricia
    de un mundo en mies, de un celestial granero.

         ¿Eres limpio cristal, o ventisquero
    destructor? No, no sé.De esta delicia,
    yo sólo sé su cósmica avaricia,
    el sideral latir con que te quiero.

         Yo no sé si eres muerte o si eres vida,
    si toco rosa en ti, si toco estrella,
    si llamo a Dios o a ti cuando te llamo.

  • A felipe ruiz ii

       ¿ Cuándo será que pueda
    libre desta prisión volar al cielo,
    Filipe, y en la rueda
    que huye más del suelo
    contemplar la verdad pura sin duelo?
       Allí, a mi vida junto,
    en luz resplandeciente convertido,
    veré distinto y junto
    lo que es y lo que ha sido,
    y su principio propio y ascondido.
       Entonces veré cómo
    la soberana mano echó el cimiento
    tan a nivel y plomo,
    do estable y firme asiento
    posee el pesadísimo elemento.
       Veré las inmortales
    colunas, do la tierra está fundada;