"Estamos marcando la senda hacia el futuro de las inspecciones y calibraciones en vuelo"

1.- Háblenos de Canard y cuéntenos cómo surgió.

El equipo de Canard Drones

La industria del transporte aéreo es la segunda más grande del mundo, después de la petrolera. En 2016 hubo 37 millones de vuelos que transportaron a 3.500 millones de pasajeros, lo cual generó 650 billones de euros de ingresos.

La seguridad es la prioridad número uno de esta industria. La mayor parte de los accidentes aéreos se produce durante las fases de aproximación y aterrizaje. Para asegurar que los aviones aterricen de forma segura, los aeropuertos utilizan unas balizas visuales y de radio conocidas como sistemas de ayuda a la navegación aérea. Estas balizas se verifican y calibran desde el aire utilizando aviones tripulados, en unas operaciones caras, complejas y lentas.

En verano de 2015 se me ocurrió desarrollar una tecnología que permitiera usar "drones inteligentes en aeropuertos inteligentes", y realizar las inspecciones y el calibrado mediante ayuda de drones de manera mucho más rápida, barata y eficiente. Contacté con Ana Pérez, Rafael Aguado y Juan Díaz, mis actuales socios, y juntos constituimos Canard Drones a finales de ese año. Somos cuatro ingenieros (aeroespacial, telecomunicaciones, informáticos) con dilatada experiencia técnica y de desarrollo de negocio en el entorno del transporte aéreo civil y militar.

2.- ¿Cuál es su vínculo con el espacio?

Para realizar las mediciones y calibraciones desde el aire se necesita un alto grado de precisión. El rango de error habitual de un GPS en tierra es de unos 2 metros en mediciones horizontales, y de hasta 15-18 metros en altura.

Una de las razones fundamentales por las que usamos tecnología espacial es porque nos permite dotar al sistema de una precisión que de otra forma sería prácticamente imposible de obtener. En Canard decidimos utilizar las señales de EGNOS (European Geostationary Navigation Overlay Service), el primer sistema europeo de navegación por satélite, que aumenta el sistema de navegación por satélite GPS y lo hace adecuado para aplicaciones críticas de seguridad.

Equipo técnico de Canard Drones inspeccionando el dron

EGNOS es un proyecto conjunto de la Agencia Espacial Europea (ESA), la Comisión Europea y Eurocontrol, la Organización Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea. Esta tecnología, combinada con sistemas de posicionamiento aumentado, nos permite obtener una precisión de unos 2 cm. Este altísimo grado de precisión es fundamental para obtener la solución que necesitan nuestros clientes.

3.- ¿Qué tecnología desarrolla y cuál es la situación de esta tecnología a nivel internacional?

Canard ofrece inspección en tiempo real y calibración de las ayudas a la navegación en los aeropuertos. Utilizamos el posicionamiento preciso mediante satélites y realizamos inspecciones de vuelo muy precisas mediante el uso de drones equipados con sensores, en lugar de utilizar aviones tripulados.

Canard ahorra cantidades considerables de tiempo y dinero a los gerentes de aeropuertos, ya que disminuye el tiempo necesario para realizar la inspección de vuelo y, por lo tanto, disminuye los costos operativos y evita el coste de oportunidad relativo a la pérdida de ingresos derivado de la inactividad en las pistas que están siendo inspeccionadas.

4.- ¿En qué campos se aplica y qué beneficios aporta a la sociedad?

El enfoque inicial es proporcionar servicios de inspección y calibración automatizada en aeropuertos, con un procedimiento sin emisiones nocivas ni ruidos. Nuestro sistema aumenta la disponibilidad de las inspecciones de vuelo, evita poner vidas humanas en riesgo durante el procedimiento de inspección de vuelo y cumple con las regulaciones internacionales.

Dron volando en una de las pruebas

Nuestra tecnología podría ser extendida a otros campos de aplicación como la inspección industrial en helipuertos, puertos marinos, refinerías petroquímicas, aerogeneradores eólicos, campos de generación de energía electro voltaica, autopistas, carreteras, puentes y en general lugares peligrosos, en altura, complicados de acceder o en general que necesiten medidas de precisión tomadas con sensores.

5.- ¿Por qué decidió participar en el programa ESA BIC Comunidad de Madrid?

Decidimos participar en el programa ESA BIC Comunidad de Madrid porque tenía todos los condicionantes necesarios para facilitar que la idea se materializara y la pudiéramos llevar al mercado.

Aparte de los beneficios evidentes de estar asociados a una entidad de prestigio como es la Agencia Espacial Europea, contamos desde el principio con el inestimable apoyo de la Fundación para el Conocimiento madri+d que nos facilita el acceso a su Red de Mentores y a los programas formativos y de desarrollo, la conexión con las fuentes de financiación, la búsqueda de socios tecnológicos, el acceso a bolsas de empleo, y el acceso a otros socios e instituciones colaboradoras de primer nivel como el Clúster Aeroespacial de Madrid, la Plataforma Aeroespacial Española, el Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación, el Vivero de Empresas de Móstoles y el Parque Tecnológico de la Universidad Carlos III de Madrid, entre otros miembros destacados con los que hemos colaborado.

El programa también incluye financiación de la ESA y de la Consejería de Economía, Empleo y Hacienda de la Comunidad de Madrid, que fue muy importante para sufragar los gastos de desarrollo iniciales y realizar la primera contratación.

6.- ¿Cuáles son los principales beneficios que está obteniendo? ¿Qué logros ha conseguido?

Hemos pasado de tener una idea a estar comercializando un sistema que inspecciona y calibra de forma eficiente los sistemas de ayuda a la navegación aérea en aeropuertos. Hemos cerrado acuerdos tecnológicos con Microsoft, Intel y Vodafone, contamos con el apoyo de grandes empresas de gestión de aeropuertos como AENA en España, Aeropuertos de París en Francia, Schiphol Group en los Países Bajos, y la AAAE (Asociación de Ejecutivos de Aeropuertos Americanos) en Estados Unidos.

Carlos Romero, gerente del ESA BIC Comunidad de Madrid; Federico Morán, director de la Fundación madri+d; Ana Pérez, CBO; Jorge Gómez, CEO; Eduardo Díaz, director del Área del Emprendedor de Base Tecnológica madri+d; y Niels Eldering, director de Transferencia de Tecnología en ESA, en la presentación oficial del Programa.

En apenas año y medio hemos recibido 16 premios internacionales de innovación y emprendimiento dotados con más de 350.000 euros en metálico y hemos cerrado una ronda de inversión de capital semilla de más de 1 millón de euros. Tenemos más de 30 aeropuertos internacionales interesados en nuestra tecnología y, si todo va como esperamos, próximamente anunciaremos los primeros clientes. Todo esto no hubiese sido posible sin el apoyo recibido por parte de la ESA y de la Comunidad de Madrid.

7.- ¿Cómo espera que sea la evolución de la tecnología y del mercado? ¿Qué lugar ocupa y quiere ocupar la empresa?

La irrupción de los drones inteligentes es imparable y la gran mayoría de los expertos prevé avances importantes en robótica e inteligencia artificial (IA) en la próxima década: la IA y la robótica formarán parte del paisaje ordinario de la población en general en 2025, integrándose en la práctica totalidad de los aspectos de la vida cotidiana de la mayoría de las personas.

El número de pasajeros se duplica cada diez años y la previsión de crecimiento de la industria aeronáutica es cada vez mayor. Actualmente hay unos 42.000 aeropuertos en todo el mundo, que invierten unos 4.000 millones de euros anuales en realizar las inspecciones de sus sistemas de ayuda a la navegación aérea. Y estas cifras siguen creciendo a un ritmo del 5% anual.

La única alternativa que existe hoy día para realizar las inspecciones en vuelo es utilizar aviones tripulados. Con la introducción de los drones inteligentes de Canard queremos dotar a los gestores de aeropuertos de una alternativa económica, rápida y efectiva. Somos conscientes de que la irrupción de una tecnología disruptiva como la de Canard será gradual e incremental, si bien estamos convencidos de que estamos marcando la senda hacia el futuro de las inspecciones y calibraciones en vuelo.