Entrevista a Jose Real Fablab Manager, investigador en la Escuela de Arquitectura, Ingeniería y Diseño de la <a href="https://universidadeuropea.com/" title="Universidad Europea" alt="Universidad Europea" target="_blank">Universidad Europea</a> de Madrid.
¿Qué le parece la iniciativa de la Noche Europea de los Investigadores? ¿Cómo valora que su objetivo fundamental sea acercar la figura del investigador a los ciudadanos y fomentar las vocaciones científicas y el espíritu emprendedor entre los jóvenes?
Que existan este tipo de iniciativas es un buen síntoma para la investigación en general.
Nos acerca a los ciudadanos a nuevos progresos e investigaciones y fomenta en los jóvenes que ser científico no es llevar una bata blanca, sino que abarca descubrir, aprender, divulgar y emprender.
¿En qué consiste la actividad que organiza y cuál es el objetivo principal de la actividad?
Para acercarnos al gran público enseñamos de una manera sencilla cómo funciona una impresión 3D de una manera muy práctica, escaneando e imprimiendo a varios de los asistentes. A continuación, enseñamos nuestros últimos proyectos.
¿A qué tipo de público se dirige?
Cualquier persona curiosa puede aprender sobre la fabricación digital, no es el futuro, es el presente.
¿Por qué decidió lanzarse y participar en la Noche?
Desde la Universidad Europea de Madrid me invitaron y lo vi como una oportunidad increíble de poder divulgar conocimiento de una manera sencilla y llegar al máximo público posible.
¿Cuál cree que es la opinión de los ciudadanos acerca de los científicos?
Cuando pienso en un científico no me viene a la mente una Marie Curie o un Stephen Hawking, de hecho, si pones en Google "científico" aparecen imágenes de personas con bata blanca, o a Doc, el científico de Regreso al Futuro. Por un lado, está bien que se asocie al científico o investigador a alguien creativo o inventor, pero también está el perfil del estudioso y metódico, con afán de enseñar su conocimiento. De hecho, la mayoría de los avances científicos que tenemos en nuestro día a día casi nadie sabe quién lo descubrió o inventó.
¿Cómo nació su vocación científica? ¿Cuándo y por qué decidió que quería ser científico?
En 2014 el profesor José Luis Esteban Penelas me invitó a participar en el Pabellón de Suiza en la V Bienal de Arquitectura de Venecia, fui como profesor coordinador de equipo y la experiencia fue gratificante. Estudiamos cómo podrían ser las ciudades del futuro y es apasionante que, a través de la investigación y sus resultados, se encuentren nuevas soluciones.
¿Qué le diría a los jóvenes para animarles a seguir una carrera científica?
Que no le tengan miedo a aprender, investigar y sobre todo a fracasar. Muchas veces se aprende más no consiguiendo resultados a la primera, aprendes de errores y te haces eficaz. El ser humano tiene una capacidad innata de aprender, y hay que fomentarlo.
¿Se ha beneficiado de ayudas europeas en su carrera científica? ¿Cree que Europa apoya suficientemente la investigación?
No. Creo que hay buenas iniciativas, pero es difícil acceder a ellas si no te dedicas sólo a investigar ya que casi siempre cuando tienes conocimiento de esa ayuda, ya ha pasado el plazo o está asignada.