Música y tecnología llevan siglos inmersas en una relación fascinante pero no siempre sencilla
Los últimos avances en la inteligencia artificial, que permiten generar ritmos cada vez más indistinguibles de los producidos por humanos, ha revivido viejos fantasmas en el mundo de la música. En este artículo publicado en Aeon, el profesor de Ciencia y Tecnología (y batería aficionado) Jack Stilgoe repasa otros momentos de la Historia en los que los nuevos avances tecnológicos afectaron a la música.
Desde las flautas con llaves mecánicas, que permiten tocar las notas de manera sencilla, al Auto-tune, pasando por las pianolas o las cajas de ritmos, Stilgoe explica cómo tecnología y música llevan conviviendo siglos. Y aunque innovaciones como los fonógrafos hayan hecho que muchos músicos perdieran su trabajo, en la mayor parte de los casos el arte es capaz de incorporar esos nuevos elementos y usarlos a su favor.