Sufrir hambre o pobreza en el vientre de nuestras madres nos puede predisponer a padecer enfermedades a lo largo de nuestra vida
Entre los años 1919 y 1939 la economía estadounidense y mundial sufrió una fuerte recesión, la llamada Gran Depresión. Este mes, un estudio en la revista Proceedings of the National Academy of the Sciences ha mostrado que las personas que nacieron en esa época poseen en su ADN una serie de modificaciones que les hacen envejecer antes.
No es la primera vez que se establece una relación entre estímulos en el feto o en los primeros años de vida y cambios epigenéticos en el genoma, es decir, alteraciones que afectan a las moléculas de ADN, pero no a la propia información genética. Por ejemplo, otro estudio publicado en 2008 mostró que las personas nacidas en Holanda durante la época de hambruna en el país, al final de la Segunda Guerra Mundial, tienen marcadores epigenéticos que les hacen más propensas a contraer enfermedades metabólicas ya de adultos.