En este artículo en The Conversation firmado por el investigador de la Universidad de Salamanca J.Guillermo Sánchez León se cuenta cómo la idea de que los movimientos de los astros en la bóveda celeste afectaba al futuro humano contribuyó a desarrollar la astronomía.
Hasta el siglo XVII astrología y astronomía se consideraron áreas complementarias, como atestiguan textos antiguos, incluidos los del astrónomo Ptolomeo, que vivió hace dos mil años. En el artículo, Sánchez León también explica el origen de las constelaciones y los signos zodiacales.