Profecía del anti-darwin
El hombre, que creyó que provenía
de las figuras geométricas,
o de las piedras arrojadas
hacia atrás por los sobrevivientes
del diluvio, cuando un sueño les dijo
que arrojaran los huesos de la tierra
les llevó un par de siglos entender
qué demonios se les pedía que hicieran),
el hombre, decía, que creyó
devenir como una emanación
del arquetipo platónico,
o bien del Verbo encarnado
en un sujeto y su costilla,
incapaces en conjunto de etc.,
habiendo sido refundada la raza
por un barco que encalló en Turquía
tras andar a la etcétera, etcétera,
en fin, el que creyó ser guijarro
o arcilla o triángulo o sueño
ahora se cree un mono. Nos reiremos mucho
a la vuelta de los siglos de esta nueva
religión y su simiesco padre.