José Miguel Sánchez Llorente<br/>Gerente de la Fundación Parque Científico de la Universidad de Salamanca
José Miguel Sánchez Llorente es licenciado en Físicas, doctor por la Universidad de Salamanca, premio extraordinario de doctorado, premio de Investigación José Garmendia y posee un master en gestión empresarial. Tiene amplia experiencia en el campo de la consultoría empresarial con más de nueve años en la consultora Accenture. Desde 2005 está al frente de la Clínica Odontológica de la Universidad de Salamanca, colabora en docencia en la Facultad de Ciencias y en 2010 asumió la gerencia de la Fundación Parque Científico de la Universidad de Salamanca.
1.- ¿Qué es la Fundación Parque Científico, cómo está constituido y cuáles son sus objetivos?
La Fundación Parque Científico es una Fundación privada de carácter público cuyo capital fundacional fue establecido por la Universidad de Salamanca. El patronato de la Fundación es el órgano rector y está constituido por la Universidad de Salamanca, el Consejo Social de la Universidad, los Ayuntamientos de Villamayor (donde nos encontramos físicamente, a 3 kilómetros de la capital) y Salamanca, la junta de Castilla y León, la Cámara de Comercio, la Diputación y el Banco de Santander. Entre nuestros objetivos están los siguientes:
- Fomentar y apoyar la creación de empresas de base tecnológica, impulsando y dinamizando la transferencia de tecnología desde los grupos de investigación de la Universidad de Salamanca a las empresas del entorno.
- Facilitar un conjunto de infraestructuras genéricas de apoyo a la innovación complementadas con suelo de calidad para la instalación de empresas innovadoras y el fomento de la cultura emprendedora.
- Promocionar económica y socialmente Castilla y León, la investigación científica y la internacionalización de resultados de investigación de calidad de la Universidad de Salamanca.
- Favorecer la creación de empleo estable y de calidad gestionando y poniendo en marcha proyectos de especial relevancia y dimensión en el campo de la I+D+i.
2.- ¿Cuál es el proceso de maduración de las ideas emprendedoras en la Universidad de Salamanca y Parque Científico?
La Universidad de Salamanca tiene establecido un trayecto para su seguimiento por nuestros emprendedores desde el momento en el que surge la idea hasta la fase de plasmarla en un producto y su venta a cliente. El proceso comienza en el Centro de Innovación y Dinamización Empresarial (CIDE) Es un previvero empresarial para Empresas Innovadoras y/o de Base Tecnológica (EIBT's), que permite a emprendedores de la comunidad universitaria disponer de unos despachos totalmente equipados en el que dar sus primeros pasos como empresarios: desarrollo de su proyecto empresarial, contactos con posibles inversores, reuniones con futuros clientes, entidades financieras, etc. Los objetivos de esta iniciativa pasan por apoyar y contribuir al desarrollo de la parte empresarial de los proyectos de emprendedores, mientras elaboran y desarrollan las primeras fases de su plan de negocio y fundamentalmente facilitar un asesoramiento estable y permanente de los proyectos.
Cuando la empresa ya existe a nivel fiscal se les ofrece la posibilidad de pasar al edificio INcubadora. Este recinto dispone de aparataje de última tecnología y se ha enfocado fundamentalmente al sector Bio. El período de estancia en este inmueble es limitado para dejar fluir el tránsito de emprendedores entre las distintas fases de maduración empresarial. Tras agotar el periodo de ocupación o cuando la empresa lo considere oportuno, se produce el salto a los edificios de servicios comunes, el M2 o el M3. Estos dos son ya arquitecturas de mayor volumen, donde se premia el contacto con empresas del sector apareciendo sinergias que aumentan el valor añadido que otorga el Parque. Para aquellas empresas cuyo crecimiento sea rápido y rentabilidad adecuada, se ofrece la posibilidad de construir edificios propios en los terrenos de la Fundación.
3.- ¿A qué se dedican las empresas y centros de investigación incluidos en el Parque?
Las empresas ubicadas en nuestras instalaciones tienen una dedicación muy heterogénea. Contamos con empresas TIC, Ingenierías, Biotecnología, Consultoría medioambiental. Aún no ha llegado, somos un Parque joven, una especialización concreta. Dicha especialización, a priori se espera que surja de los dos centros de investigación que están incluidos en nuestro conjunto de edificios, por un lado el CIALE y por otro lado el CLPU.
El CIALE es el Centro de Investigaciones Agrarias Luso Español. Sus objetivos se centran en investigaciones de I+D agrario dentro de los ámbitos de la biodiversidad, mejora genética, producción vegetal, sanidad vegetal, recursos hídricos y otros que puedan surgir en el futuro. Para su funcionamiento, el Parque provee del Servicio de Invernadero Experimental, un invernadero dedicado a la investigación que sirve de banco de ensayos a los investigadores universitarios y empresas del sector. La voluntad de los grupos investigadores aglutinados en el CIALE es profundizar en el conocimiento de la agrobiotecnología y explorar sus aplicaciones para conseguir una agricultura moderna, sostenible y de alto rendimiento.
El CLPU es el Centro de Láseres Pulsados Ultracortos Ultraintensos, una Instalación Científico Técnica Singular (ICTS). Es el laboratorio de referencia en España de láseres pulsados de femtosegundo con potencias de pico al nivel de Gigavatios, Teravatios y Petavatio. El objetivo de esta instalación es dar servicio a la comunidad científica e industrial proporcionando acceso a los más sofisticados láseres de alta potencia, así como asistencia técnica, a través de colaboraciones. Las instalaciones están abiertas a usuarios nacionales e internacionales.
4.- Hablemos de financiación, ¿Cómo se financia el Parque y cuál es la relación económica con las empresas instaladas o adheridas?
Salvo la ayuda que nos brinda anualmente la Universidad de Salamanca en la medida de sus posibilidades, el capital de funcionamiento y amortización de las inversiones realizadas para la construcción de los edificios y compra de aparataje, se obtiene a partir del rendimiento de las instalaciones en virtud de los servicios de I+D que ofrecemos a nuestras empresas.
Adicionalmente trabajamos en la obtención de ingresos extraordinarios mediante la gestión de proyectos a terceros, rentabilizamos y hacemos de intermediarios con las instalaciones de la Universidad de Salamanca y recurrimos a entidades financieras en formato préstamo cuando la situación lo obliga.
Respecto a las empresas instaladas se ha optado por ofrecerles una tarifa plana que incluya desde el suelo ocupado hasta la utilización de aparataje y servicios comunes, pasando por la logística de funcionamiento tal como servicios de conserjería, mantenimiento, conexión a datos en fibra, técnicos de apoyo, climatización, gestión de becarios, recruiting, limpieza...
5.- ¿Existe un proceso real de transferencia de conocimiento bidireccional Universidad-Empresa?
Ciñéndonos al caso de la Universidad de Salamanca y su Parque Científico hay que afirmar que sí existe, pero que es un proceso dificultoso. No es sencillo aunar objetivos entre dos estamentos con personalidad intrínseca muy diferente. Si para una parte es la investigación pura la que domina, la otra necesita investigación aplicada. Los protocolos de trabajo, carácter, horarios y metodologías son distintos. Es en este punto donde entra en juego el Parque Científico, para intentar conjugar dos realidades diferentes que han de colaborar para ofrecer valor a la sociedad.
En nuestra Fundación, e imagino que en el resto de entidades relacionadas con Universidades, hay modelos de éxito y fracaso en este intento de transferencia. Aprendemos día a día de estas experiencias y lo que sí se contempla es que el número de spin off nacidas en los últimos tres años ha aumentado respecto a periodos anteriores y que en un porcentaje muy alto de nuestras entidades instaladas, hay algún tipo de conexión con algún departamento de la Universidad. Es decir, es un modelo por el que se está apostando y que poco a poco va dando sus frutos.
6.- ¿Qué aconsejaría a los jóvenes que están terminando sus estudios universitarios y se están plateando promover una empresa de base científico-tecnológica?
Mi consejo, y así lo trasmito a los estudiantes con los que tengo contacto directo, es que experimenten la sensación de trabajar para uno mismo, que dejen volar su imaginación para construir su propio futuro y que, por qué no decirlo, el trabajo por cuenta ajena no siempre da la felicidad. Tras este impulso inicial necesario, lo que precisa el emprendedor son algunos consejillos que quizá por la experiencia ya acumulada nos atrevemos a dar:
a.- Perder el miedo a equivocarse. Es algo que en nuestro país está mal visto y existe la mala tendencia de mejor no hacer nada a hacer algo erróneamente.
b.- Buscar equipo y hacerlo con perfiles lo más disímiles posibles, buscar la inteligencia sin tener miedo a que nos hagan sombra, querer crecer con los demás.
c.- Dedicarse a lo que se sabe, e intentar externalizar, en la medida que sea posible, otras tareas en las que se invierte tiempo que no redunda en el florecimiento de la idea emprendida. En ocasiones es mejor que un externo realice por ti labores de contabilidad o marketing por ejemplo. Tareas en los que no se es experto y que realizadas por un profesional redundan de forma muy beneficiosa.
d.- Darle tiempo de maduración a tu empresa pero fijar a priori un periodo máximo de pervivencia sin beneficios. Si una idea no genera rendimientos al cabo de un plazo establecido, hay que desecharla y buscar nuevas oportunidades de negocio. Anclarse en una ilusión que desde todas las perspectivas se indica que no es correcta es simplemente perder el tiempo.
f.- Tener los ojos abiertos y la cabeza fría para buscar elementos tales como universidades, parques, fundaciones o instituciones que nos ayuden en nuestro propósito.
7.- Como ve el futuro de la Fundación Parque Científico, ¿Cuáles son sus próximos retos como Gerente?
Después de dos años en los que hemos tenido un crecimiento exponencial, tenemos que pensar en la estabilización del Parque. Y esa estabilización pasa por establecer unos ingresos fijos que cubran la amortización de los edificios realizados. No podemos estancarnos en los servicios que ofrecemos a nuestras empresas y hemos de crecer en este sentido de modo que sigamos siendo atractivos. La situación económica global ha hecho que los precios de alquileres, tanto en polígonos como en la capital salmantina, se hayan desplomado. No debemos buscar competir en este sentido pues nuestro negocio es muy distinto. Son muchas las entidades que en estos momentos sólo se fijan en el precio a fin de mes sin percatarse de que el crecimiento empresarial pasa por el valor intangible obtenido al estar dentro de un colectivo. Ese valor intangible nos ha convertido en referente de crecimiento y buenas prácticas en nuestra provincia.
Otro desafío a abordar es la ampliación de nuestro límite de acción. El tejido empresarial circundante (Salamanca, Zamora y Ávila) es muy limitado y hemos de buscar empresas fuera de Castilla y León haciendo atractiva su ubicación en nuestros edificios. De igual forma ha de comenzar un proceso de internacionalización de las empresas instaladas, en busca de nuevos mercados exteriores.
Y, por supuesto, afianzar nuestra marca y el sello de la Universidad de Salamanca. Nuestro vínculo con la institución es nuestro principal baluarte, máxime en el entorno macroeconómico en el que nos movemos.
