La electricidad
Muchas veces has oído
hablar de electricidad.
¿Qué sabes tú de este fluido
maravilloso, en verdad?
Es una fuerza esparcida
que vaga en el mundo incierta;
mansa, muy mansa dormida,
y aterradora despierta.
Es materia muy sutil,
que se junta y enrarece,
produciendo efectos mil
cuando en un punto aparece.
Tal es la electricidad,
que por todas partes cunde,
la que con velocidad
más que la luz se difunde.
Contrarias fuerzas motiva,
según cómo se presenta;
positiva o negativa,
ya apacible, ya violenta.
Las fuerzas de un mismo nombre
a su encuentro se rechazan;
las contrarias, no te asombre,
estrechamente se abrazan.
Y de este abrazo resulta
misteriosa conmoción,
fuerza terrible, que oculta,
se desarrolla a su acción.
Mas este potente fluido
hoy lo maneja cualquiera,
pues el hombre ha conseguido
domesticar esta fiera.
Hoy se aplica... a cualquier cosa,
madre, la electricidad;
los focos de luz copiosa
que iluminan la ciudad.
Transmisión del pensamiento
y de la palabra humana...
iQuién sabe el feliz portento
que le ha de caber mañana!
Se aplica a locomoción,
y a tantas cosas se aplica,
que su provechosa acción
el progreso vivifica.
Mas en fiera libertad
en la atmósfera, es de ver
aquel terrible poder
que tiene electricidad.