Existe una gran preocupación por la creciente expansión de las especies exóticas invasoras, especialmente en el Mar Mediterráneo
Las especies invasoras representan una gran amenaza para la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad global. Especialmente, el Mar Mediterráneo es una de las zonas especialmente vulnerables a las invasiones biológicas debido a su intenso tráfico marítimo, acuicultura y la construcción del canal de Suez, el cual comunica el Mar Rojo (un mar tropical) con el Mediterráneo. De hecho, es el mar europeo que alberga mayor número de especies no autóctonas, y el número de invasiones se ha doblado cada 20 años desde inicios del siglo XX. De las más de 500 especies introducidas en el Mediterráneo, la introducción de algas no nativas es de especial importancia. En efecto, varias de las especies de macroalgas introducidas en el Mediterráneo tienen impactos negativos graves en los hábitats nativos como las praderas de Posidonia oceanica, de Cymodocea nodosa, o las comunidades de gorgonias así como en especies de fauna emblemática como la nacra o el coral Cladocora caespitosa, o especies de interés comercial / pesquero como pueden ser el erizo de mar Paracentrotus lividus o peces como el sargo y la cántara.
Con el apoyo del Ministerio para la Transición Ecológica, a través de la Fundación Biodiversidad, el grupo de investigación de ecología marina de IMEDEA-CSIC goza actualmente del proyecto de investigación INVHALI. Este proyecto es coordinado por la Dra. Fiona Tomas, en coordinación con el grupo de robótica de la UIB, Systems, Robotics and Vision para el estudio del alga invasora Halimeda incrassata. Este alga no se ha detectado hasta ahora en otro lugar del Mediterráneo, a excepción de las baleares, y fue descubierta hace poco tiempo en aguas de Mallorca y el Parque Nacional del Archipiélago de Cabrera.
la ecología marina y la robótica aúnan esfuerzos para comprender y combatir el estado de invasibilidad de Halimeda incrassata
El objetivo principal del proyecto es estudiar, detectar y erradicar esta especie invasora mediante el uso de un submarino y un catamarán teledirigidos. Por tanto, la ecología marina y la robótica aúnan esfuerzos para comprender y combatir el estado de invasibilidad de Halimeda incrassata. Si los resultados son positivos, el protocolo podría reproducirse en cualquier lugar donde pudiera aparecer el alga en el Mediterráneo.
Fotografía donde se observa las praderas de Halimeda incrassata en los fondos de la isla de Cabrera. Autora: Rocío Jiménez-Ramos (investigadora del proyecto).
Esta alga coloniza fondos de arena, así como zonas de praderas de Posidonia oceanica y Cymodocea nodosa; así pues, podría tener fuertes impactos ecológicos en dichos ecosistemas nativos. De hecho, el único estudio existente hasta el momento, indica que en hábitats arenosos colonizados por H. incrassata ha habido cambios significativos en la distribución espacial del raor (Xyrichtys novacula), un pez de gran valor comercial en las pesquerías locales de las Islas Baleares. Además, se prevee que, siendo su origen tropical, que su expansión se vea favorecida por el calentamiento global y que esta especie se vaya extiendo exitosamente por Baleares y otras zonas del Mediterráneo. De hecho, desde su detección inicial en 2011 en una zona de la Bahía de Palma, esta especie se ha expandido por una parte del sur de la isla y está presente en varias zonas protegidas de Baleares; la Reserva Marina de Bahía de Palma, la Reserva Marina des Migjorn de Mallorca, y el Parque Nacional del Archipiélago de Cabrera, el único Parque Nacional Español mediterráneo.
Efectivamente, existe una gran preocupación por la creciente expansión de las especies exóticas invasoras. A nivel global hay convenios que reconocen el problema de estas especies, a nivel europeo hay directivas que encauzan las estrategias a tomar y éstas son traspuestas a nivel nacional, donde, además, hay leyes que tratan y regulan esta problemática. Dado el reciente hallazgo de Halimeda incrassata en aguas españolas (primer avistamiento para el Mediterráneo), dicha especie no está incluida de momento en ningún catálogo de especies exóticas invasoras. Así pues, este proyecto pretende no solamente obtener datos de gran interés científico, sino también indispensables para una adecuada y efectiva toma de decisiones y gestión.
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