En este artículo de opinión publicado hace unos días en Science, el antropólogo Agustín Fuentes, de la Universidad de Princeton, aborda el creciente ataque a la ciencia y a los científicos, especialmente en el contexto del clima político actual en los Estados Unidos.
Fuentes apunta que los resultados científicos sobre temas cruciales como el cambio climático, la salud reproductiva y la vacunación están siendo objeto de ataques políticos y censura en entornos educativos, y destaca que, aunque la ciencia ha estado politicizada históricamente, es ahora más urgente que nunca que los científicos actúen como defensores políticos de su trabajo y hallazgos.
A pesar de la resistencia dentro de la comunidad científica para involucrarse en la política, el artículo argumenta que la defensa activa del conocimiento científico se ha vuelto esencial. Muchos científicos, incluidos aquellos de grupos marginados, enfrentan ataques intensos por su trabajo, lo que hace necesario un compromiso proactivo. Además, Fuentes argumenta que los científicos deben educar a los estudiantes sobre la diferencia entre evidencia científica y pseudociencia, y participar en la formulación de políticas. Este enfoque no solo ayudaría a combatir la desinformación, sino que también demuestraría que la defensa de la ciencia es una parte crítica de su misión social, especialmente en nuestra época actual.