El análisis de restos fósiles humanos de más de 45.000 años refuerza la idea de que los humanos y los neandertales convivieron y se cruzaron de forma frecuente
Los restos, que provienen de cuevas de Bulgaria y República Checa, también dan pistas sobre cómo pudo ser la migración y diversificación de los primeros humanos en Asia y Europa. Los resultados han sido publicados esta semana en dos artículos totalmente independientes, pero con resultados complementarios, en las revistas Nature y Nature Ecology & Evolution.
Puedes leer más sobre el estudio en español los principales medios nacionales, como El País, ABC o El Mundo, o si lo prefieres, la propia revista Nature de esta semana ha publicado una noticia sobre el tema.
Foto de portada: Foto de Marek Jantac de uno de los cráneos estudiados.