Uno de los más grandes poetas españoles actuales nos muestra en este poema cómo la vida vegetal surge en un milímetro abierto en el cemento
Uno no sabe muy bien si es ahora el tiempo exacto en que broten las parras, pero sí que estamos en plena primavera, y todo florece tras el invierno. Y todo esto a pesar de este 2020 que nos ha traído una primavera nefasta de coronavirus y confinaciones, que nos recuerda - en abstracto – las palabras de T. S. Eliott: “Abril es el mes más cruel…” Pero también nos trae este luminoso soneto de uno de los más grandes poetas españoles actuales, Juan Antonio González Iglesias que en ‘Ha brotado la parra verde y roja’ nos muestra cómo la vida vegetal surge en un milímetro abierto en el cemento, que nadie ni nada podrá detener su crecimiento. Y la parra pintará para el deleite de todos nosotros “verdaderas hojas de acanto por la arquitectura”. ¡Viva la botánica!
Más información en el blog La alegría de las musas 2
Ha brotado la parra verde y roja
Ha brotado la parra, verde y roja,
del milímetro abierto en el cemento.
Ya nada detendrá su crecimiento.
Ya va plantando donde se le antoja
nuevo estandarte cada nueva hoja,
trémulo bajo el sol, feliz si lento.
Bajo la lluvia todo es un momento
de diminuto bosque que se moja.
Ya se imponen sus frondas imprevistas
sobre la geometría en las afueras
de París. En la plaza gris y dura
dibuja arterias sobre las aristas
del hormigón, y pinta verdaderas
hojas de acanto por la arquitectura.
De Confiado. Editorial Visor. 2015.
Juan Antonio González Iglesias. (Salamanca, 1964)