Los varamientos de cetáceos llaman la atención de la sociedad y aunque cada vez hay más estudios sobre sus posibles causas, los científicos presentan distintas hipótesis pero no se decantan por una respuesta concreta.
Cetáceo en el océano. / Antonio Figueras
Cada cierto tiempo los medios de comunicación nos sorprenden con un nuevo varamiento de cetáceos. Muchas veces son delfines a los que desde el famoso Flipper todos tenemos cariño, aunque los que tratan con ellos saben que tienen su puntillo de mala uva. Los varamientos suceden en todo el mundo. Recientemente en Irán y antes, por citar algunos, en Estados Unidos, Nueva Zelanda y Australia, Georgia, Malvinas, Venezuela, Golfo de Vizcaya, Andalucía, Canarias y Galicia.
Los delfines enganchan bien con los seres humanos porque tienen personalidad, carácter y estados de ánimo. También disponen de una alta capacidad cerebral, que les permite recordar hechos, reaccionar a estímulos y aprender conductas. Se comunican a través de vocalizaciones y de ondas sonoras de ultrasonidos.
Muchos poseen jerarquía social, con un líder, y suelen moverse en grupos, en los que los machos van en las afueras, y las hembras las crías en el medio. Son muy curiosos con las embarcaciones, a las que en ocasiones acompañan durante dos horas. Los pequeños son los más juguetones. En algunos casos cuentan con una nodriza, que se ubica debajo de la parturienta, para recibir e impulsar hacia arriba a la cría para que respire. Tiene un período de gestación de 12 meses y pueden llegar a vivir 40 años.
Existen registros históricos de varamientos de cetáceos al menos desde 300 años antes de Cristo. Sin embargo, en los últimos años, los varamientos parecen ser más frecuentes y afectan a más individuos
De hecho existen registros históricos de varamientos de cetáceos al menos desde 300 años antes de Cristo. Sin embargo, en los últimos años, los varamientos parecen ser más frecuentes y afectan a más individuos. Se desconoce si esto es debido a que hay un mayor número de personas que avisan de los varamientos o a que, debido a la influencia del ser humano en los océanos, el número varamientos está creciendo cada año.
Los varamientos masivos de ejemplares son relativamente comunes en casi todas las latitudes y en todas las épocas del año. Generalmente abarcan tres especies: el calderón, la falsa orca y el cachalote. Todos ellos tienen una compleja estructura social, en estos casos el error es del líder que normalmente conduce la manada, al acercarse demasiado a la costa persiguiendo presas o escapando puede llevar a un desastre masivo.
El mayor varamiento registrado de una sola especie, sucedió en 1946, cuando 835 falsas orcas vararon cerca de la ciudad de Mar del Plata en Argentina, según la Encyclopedia of Marine Mammals (Academic Press, 2009). La causa de este varamiento masivo no pudo ser aclarada.
ALGUNAS CAUSAS DE LOS VARAMIENTOS
- Traumatismo por colisión con buques y otros artefactos de origen humano. El tráfico marítimo está experimentando un crecimiento continuo y por tanto la probabilidad de un choque es bastante elevada. Esto puede conducir a la muerte o a la desorientación que puede acabar en un varamiento.
- Contaminación. La contaminación de las aguas por metales, aguas de cloaca, químicos, puede debilitar o incluso matar a distintas especies de cetáceos. Los veterinarios que han estudiado y recogido muestras de centenares de cadáveres coinciden en que buena parte de las muertes son atribuibles a la elevada contaminación de las aguas costeras. Esta se debe especialmente a productos químicos tóxicos, que producen un debilitamiento del sistema inmunológico de los individuos dejándolos expuestos a infecciones secundarias y al ataque de distintos tipos de virus.
- Contaminación acústica de los océanos. Una de las causas a las que se le da cada vez más importancia es la contaminación acústica de las masas de agua causada entre otros por los sonares militares. De hecho no existe ningún lugar del mundo que no esté contaminado acústicamente. Los fondos marinos de las Islas Canarias, el Estrecho de Gibraltar y el archipiélago balear son las zonas españolas en las que hay una mayor contaminación acústica submarina, lo que tiene unos efectos nefastos para los cetáceos, muchos de los cuales acaban muriendo a causa de la sordera. El ruido que producen tanto los barcos como otras fuentes artificiales, como los radares o las prospecciones petroleras, están provocando una pérdida de la capacidad auditiva de estos animales, lo que les impide algo tan esencial para su supervivencia como es el hecho de comunicarse entre ellos. Esta disminución auditiva tiene otros efectos aún más fatídicos, ya que la sordera, causada por la exposición continua a ruidos excesivos, provoca que muchos cetáceos sean incapaces de captar los sonidos de baja frecuencia que emiten los buques y no puedan esquivarlos.
- Enfermedades. Son animales enfermos, altamente infectados por endoparásitos en los pulmones, corazón, hígado o estómago, y a veces, ejemplares viejos con distintas patologías debidas a su edad avanzada.
- Ataques por tiburones u otros mamíferos. Los cetáceos pueden varar escapando o tratando de buscar refugio de ataques de tiburones o de otros mamíferos como la orca.
- Envenamiento causado por otras especies marinas. Aunque no existe suficiente información, es una hipótesis que no se pude descartar. Una ballena envenenada por la picadura o ingestiónde especies tóxicas puede desorientase y acabar en una playa.
- Cambios o anomalías en los campos magnéticos de la Tierra. Algunos biólogos creen que los cambios en los campos magnéticos de la Tierra puede interferir con el sistema biológco de navegaciónd e las ballenas causando su desorientación.
- Calentamiento global. Los cambios en las mareas, perdida de hielo en los polos, cambios en la cantidad de alimento disponible pueden hacer que los cetáceos tengan que buscara alimento en zonas menos conocidas y acabar en zonas poco profundas donde quedan atrapados.
- Seguir al grupo. Los cetáceos son animales muy sociables que frecuentemente viajan en grupo. A veces, pocas, el líder del grupo puede estar enfermo o desorientado y conducir al grupo a zonas poco profundas en las que acaban varados.
ANTE TODO, COSAS QUE NO SE DEBEN HACER
¿Que hacer cuando se descubre un cetáceo varado? En primer lugar si no sabe, no actúe. Al querer hacer bien, podría empeorar una situación ya precaria. Esto es lo que NO se debe hacer:
Cetáceo en el océano. / Antonio Figueras
- Remolcar al animal por la cola (aleta caudal) o manipularlo por las otras aletas. Pectorales (las de frente), dorsal (la de la arriba). Estas partes son extremadamente frágiles y hay elevados riesgos de fractura.
- Manipular al animal sin protección. Guantes, mascara, lentes ya que no se conoce la razón del varamiento del animal. Éste puede ser portador de una enfermedad transmisible al hombre.
PROTOCOLOS ESTABLECIDOS
En la página del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) se pueden encontrar los protocolos a seguir que resumimos a continuación:
- Desenvaramiento. Volver a poner al animal vivo en el agua. Si esta opción pareciera la más seductora, no es obligatoriamente la mejor si no se realizó un examen clínico del animal. El desenvaramiento es sobre todo interesante en el caso de varamientos en masa de individuos sanos.
- Hospitalización. En un centro autorizado, sobre la costa a condición de tener el material y de ser en un lugar relativamente tranquilo
- Eutanasia. Solo debería tener lugar cuando el pronóstico de vida no dé ninguna esperanza de rehabilitación. Su decisión solo pertenece a los veterinarios que poseen una experiencia clínica sobre estos animales, y tras un examen con todos los datos médicos disponibles.
Una vez más, el hombre es el causante, a través de actitudes irresponsables, de la muerte innecesaria de muchos animales.
Más información:
www.cemma.org
delfinweb.org
www.whalefacts.org