El síntoma más frecuente es el picor que no se calma.
El 15 por ciento de la población española sufre dermatitis atópica severa, y un 0,08 tiene un nivel grave, según han señalado el dertamatólogo del Hospital Univeritario 12 de Octubre y miembro de la Academia Española De Dermatologia y Venereología (AEDV), Javier Ortiz de Frutos, y la alergóloga y responsable médico de dermatitis atópica de Sanofi, Ainara Rodríguez, basándose en un estudio realizado por los países nórdicos.
Asimismo, la doctora ha declarado, durante la rueda de prensa sobre esta enfermedad en marco del Día Nacional, que los datos engloban "todo tipo dermatitis, pero a día de hoy no hay ningún estudio hecho en España que demuestre cuántos pacientes adultos o infantiles hay con un nivel grave".
De igual modo, ha señalado que "el problema de la dermatitis atópica es que ha sido abandonada durante toda la vida", pues no es "fácil" sacar estadísticas debido a que hay "muchos pacientes que están fuera del sistema".
Entre los síntomas más comunes se puede encontrar la queratosis pilaris, o la llamada piel de gallina de forma permanente, y la xerosis, un "término para denominar la piel extremadamente seca", según ha comentado la doctora Rodríguez.
Sin embargo, el más frecuente es el "picor que no se calma", pues dos de cada tres pacientes "se rascan durante todo el día", ha señalado. De igual modo, se encuentra "la hiperlinenialidad palmar", es decir, un exceso de líneas en las palmas de las manos, sin embargo "a esto no hay una explicación científica".
A su vez, esta patología se somete a varias fases en relación a la edad, pues según ha explicado el doctor de Frutos en los primeros años, de 0 a 2, los signos se prevalecen en la zona de la cara; de 2 a 10, los eccemas se trasladan a la zona de los brazos, axilas y piernas, mientras que en adolescentes y adultos las zonas que "más suelen picar" son las plantas de las manos y los pies.
En este sentido, el médico ha explicado que la enfermedad "tiende a mejorar con los años", pero el "60 por ciento de los casos sigue teniendo brotes de adultos y al menos tienen uno al año".
Asimismo, hay dos posibilidades "poco frecuentes": una de ellas es que desaparezca la enfermedad de "forma general", pero se sigue teniendo problemas ocupacionales; y "en otros casos, los brotes son cada vez mas intensos", lo que provoca dificultades para controlarlos.
DEMASIADA HIGIENE
La prevalencia de enfermedades atópicas o alérgicas recae en países desarrollados. Asimismo, Rodríguez ha explicado que dicha frecuencia se debe "a la teoría de la higiene", que se caracteriza por un exceso de limpieza en el día a día.
Como ejemplos, ha señalado que durante la época anterior a la caída del muro de Berlín "se realizó un estudio de asma alérgico para ver las diferencias entre la Alemania Oriental y Occidental", se expuso que en esta última zona había más prevalecia a pesar de "que se vivía en mejores condiciones, y el nivel socioeconómico era más alto".
Tras la caída, se volvió a efectuar el estudio y se demostró que las prevalencias de asma se igualaron "hacia el lado de la Alemania Occidental" en cuestión de meses.
El segundo ejemplo es un estudio americano, en el que se cogieron a 188 bebés, de los cuales 65 cuándo se les caída el chupete la madre lo limpiaba con saliva; y en los otros 169 utilizaban métodos de esterilización. La investigación demostró que aquellos bebés en los que se usaba "el método de chupeteo" tenían menos asma y dermatitis atópica, según ha añadido la experta.