Me he tomado el Sol muy a pecho.
Charles Darwin
He dejado todo camino atrás,
¿es que hay algún camino?, yo
sé que son limpias mis heridas.
Debajo de esta encina pienso
en mi desdicha y lanzo una piedra
para que rompa el Sol. Primero
fue sólo un destello en un ojo
nebular, ahora me queda.
¿Quién, dime,
quién resolvió el enigma de los días,
los echó como polvo errabundo
entregado a las olas? Compréndeme,
entiende mi abandono,
es un trabajo duro recoger cada día
con el cuenco de mis manos
la luz del amanecer.