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1. Al disolver en agua distintas sustancias (cloruro de calcio, yeso cocido, óxido de calcio, borax, detergente, etc) se observa un aumento de la temperatura.
2. Preparamos una disolución sobresaturada de acetato de sodio trihidratado y al intoducir una varilla cristaliza inmediatamente desprendiendo muchisimo calor.
3. Preparamos una bolsa con la misma disolución anterior e introducimos un disco metálico.
Si doblamos el metal a traves de la bolsa obtenemos calor instantaneo por cristalización del acetato.
4. Estas bolsas de calor pueden ser reutilizadas muchas veces pues al calentarlas al baño maria el acetato vuelve a disolverse y podemos realizar otra vez el proceso
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