Profesora Permanente Laboral del departamento de Ingeniería Química y Materiales de la Universidad Complutense de Madrid y madre de dos pequeñajos. Estudió Ingeniería Química en la Universidad Rey Juan Carlos (2008) y realizó su Tesis Doctoral en la Universidad Autónoma de Madrid (2014). Su primer contacto con la investigación fue a través de una Beca del Ministerio de Educación y Ciencia, durante el último año de carrera, gracias a lo cual descubrió su vocación investigadora. La rama de la ingeniería química que más le ha llamado la atención es la medioambiental, por lo que ha orientado su investigación al desarrollo de tecnologías medioambientales y de remediación. Así, se unió al grupo de investigación INPROQUIMA de la UCM, centrado en el desarrollo y aplicación de tecnologías fisicoquímicas para la remediación de suelos y aguas subterráneas. Recientemente ha comenzado una nueva línea de investigación enfocada en la eliminación de micronanoplásticos, contaminantes emergentes de creciente preocupación. Considera que la investigación es clave para la mejora continua de nuestro entorno, es la llave del progreso. La investigación básica es necesaria para avanzar en el conocimiento, y la aplicada, para dar respuesta a los problemas de la sociedad y mejorar nuestra calidad de vida.