Los egipcios fueron los primeros en dividir en doce partes iguales el tiempo comprendido entre la salida y la puesta del Sol. También dividieron la noche en doce partes iguales. De esta división se derivó el periodo de tiempo que conocemos como hora y el hecho de que el día tenga 24 horas.

Hablaremos del tiempo relativo y del tiempo absoluto. Para ello construiremos una maqueta del sistema solar, con plastilina, alambres y otros materiales, donde se explique el movimiento de rotación y traslación de la Tierra. Para los visitantes más pequeños, podrán vivenciar esos movimientos mediante una representación dinámica: uno será el Sol, otro la Tierra y otro la Luna, y se moverán sobre sus órbitas. Se explicará por qué el día tiene 24 horas y entenderemos, por qué existen las diferencia horarias en diferentes lugares de la Tierra. El visitante jugará con nosotros haciéndonos preguntas como: ¿Qué hora es en…?, si es la hora de desayunar en una ciudad del Hemisferio Norte ¿Qué hora es en el Hemisferio Sur?, etc. A través de un diálogo científico visitante-alumnado, estableceremos equivalencias entre: meses, años, días, horas, minutos. Ordenaremos de mayor a menor unidades de tiempo. También ordenaremos distintas imágenes de secuencias temporales.