• Los monos

    [En torno a Darwin]

    Sea como fuere,
    la provocativa fuerza,
    la libertad
    que manejábamos a nuestro antojo
    para chillar, formar parejas,
    y aun para dejarnos crucificar
    como víctimas expiatorias,
    ya carece de objeto,
    y sobre las demás especies,
    sobre nuestras narices aplastadas,
    las duras garras,
    los pies prensiles,
    con gran honor elevamos
    al que nos destrona y sucede,
    amo comprensivo, guardián astuto
    ayudado con fuego, insultos, grilletes,
    a que nuestra naturaleza de bestias
    relativamente salvajes y crueles

  • Alfa-1

    Durante su movimiento en la Cámara de Wilson, la partícula
    elemental ioniza las moléculas de gas que hay en ella, y entonces
    éstas se convierten en centros de condensación de gotas
    macroscópicas visibles o fotografiables. Este es el principio de la
    Lírica de Cámara: Hace posible ver las trayectorias de las partículas
    elementales aisladas que poseen una carga, o bien, las de los átomos
    ionizados
    .

    La instantánea intensidad de lo radiante.
    Esta Lírica de Cámara: La Cámara de Wilson

  • Enigma del cero

    Alabo su plenitud. Me gusta la esfera
    y sólo le reprocho su circuito cerrado.

    De repente se le abre un triángulo,
    llegan las fluctuaciones digitales.

    Y ahora su triple triunfo, el año 2000,
    nos convierte en las sombras de otro milenio.
    Seres del cero, ceros a la izquierda
    de sus tres lunas llenas
    en que desaparecen los invisibles que por última vez
    nos aferramos a su aro en el año 90.

    Hoy en cambio ostentamos como aro de buey
    su calificación: cero en conducta,
    en contemporaneidad, en saber del mundo electrónico

  • Bronwyn, permutaciones

    A la que renace de las aguas,
    Bronwyn-Shekinah
    Despertarás a la fuente de las
    hierbas
    LANZA DEL VASTO

    (Fragmento)

  • Poema en tres maneras (Sobre el Principio de los Relojes Mecánicos:)

    Las fuerzas estáticas
    no una bola de plata
    de un cuerpo de sólido
    sino una bola de aire
    y su fuerza material
    cuyas purezas esféricas
    derivan
    lucen con doble lustre
    no de la cantidad de masa
    una vez con el rocío y otra vez
    un ingeniero daría como ejemplo
    con los brillantes hilos constituyentes
    rieles o vigas-T, diría
    de todos sus rayos
    cuatro planos construidos para
    en una superficie tensa
    contener el mismo volumen que
    en una nube sólida de estrellas
    cuatro toneladas de masa

  • Los alquimistas

    Cuando la magia estaba en bancarrota,
    en esos días que se parecen tanto a la dimisión
    de los cuervos
    (ya sin augurios la piedra filosofal),
    ellos cogieron una idea,
    una formulación rabiosa de la vida,
    y la hicieron girar
    como a la bola del astrólogo;
    miles de manos desolladas
    haciéndola girar
    como una puta vuelta a violar entre los hombres,
    pero ya de la idea sólo quedaba su enemigo.

  • Mientras los astrónomos

    Una negrura de lava presidía la noche
                                                 en la isla oscurecida
    y una monotonía de té de Ceilán

  • Neuroplatillo

         ESTE especialistito Casualidad, galeno
    por vicio, ha visto a nuestro Hume-Wundtiano, cuando
    le pregunta algún cliente: < <¿Y esto, doctor, es bueno? > >,
    responder: < <Eso dicen... > >, y seguir trabajando.

         -El oro de la tarde está de fondo, y las
    lumbres le trasparentan el perfil ignorante:
    la barba de la carne le idiotea hacia tras
    lo que la barba en pelo le enmema hacia delante.-

         Y es de verle, lorito, cuando algún pobre cliente

  • A la nueva luna

    En el principio Dios creó el cielo
    y la tierra, luego en su día
    exacto colocó los astros en el cielo
    y al séptimo día descansó.
    Después de billones de años el hombre,
    hecho a su imagen y semejanza,
    sin nunca descansar, con su
    inteligencia laica,
    sin temor, en el cielo sereno
    de una noche de octubre,
    colocó otras luminarias iguales
    a aquellas que giraban
    desde la creación del mundo. Amén.

  • A la línea

    A TI, contorno de la gracia humana,
    recta, curva, bailable geometría,
    delirante en la luz, caligrafía
    que diluye la niebla más liviana.

    A ti, sumisa cuanto más tirana,
    misteriosa de flor y astronomía
    imprescindible al sueño y la poesía,
    urgente al curso que tu ley dimana.

    A ti, bella expresión de lo distinto,
    complejidad, araña, laberinto
    donde se mueve presa la figura.

    El infinito azul es tu palacio.
    Te canta el punto ardiendo en el espacio.
    A ti, andamio y sostén de la Pintura.