Descripción de la actividad En las antiguas verbenas, junto al olor a fritanga de los churros, el girar de los tiovivos y las casetas de tiro al blanco aparecían una serie de dulces tradicionales y sencillos, sin grasas ni conservantes que hacían la delicia de los niños y los adultos. Manzanas de caramelo, algodón de azúcar y almendras garrapiñadas eran algunas de esas entrañables golosinas que hacen sentir como un niño.
En esta actividad se estudian los secretos del azúcar que permiten confeccionar estas sencillas delicias que Don Hilarión compraba en la “Verbena de la Sacarosa” a una morena y una rubia llamadas Casta y Susana
|